60 años de VW en Brasil
23 de marzo de 2013Beetle, Escarabajo, Vocho, Pichirilo... ¿Quién no conoce el pequeño auto insignia de Volkswagen? Fusca, le llaman hace 60 años en Brasil. Los primeros 30 autos de este tipo llegaron al puerto de Santos en septiembre de 1950. Poco después se ha habían vendido todos, por el triple del precio esperado.
Era el principio de una historia de éxitos. Tres años más tarde, el 23 de marzo de 1953, se instalaba Volkswagen do Brasil con apenas 12 empleados. Del pequeño almacén en el barrio de Ipiranga, en São Paulo, salieron Escarabajos y furgonetas, con piezas importadas desde Alemania, que poco a poco fueron sustituidas por componentes de producción brasileña.
En los 60 años que siguen Volkswagen ha producido más de 20 millones de automóviles en Brasil. El país sudamericano se ha convertido en el segundo mercado de la empresa alemana, después de China. Según un estudio de la Asociación Brasileña de Anunciantes (ABA), Volkswagen es la marca más conocida por el público brasileño. Además, con 24.000 empleados, es el segundo empleador enre los fabricantes de automóviles, después de General Motors.
Primera fábrica en el extranjero
La primera fábrica de São Paulo era apenas una planta de montaje de piezas alemanas, como las que BMW y Audi instalan ahora mismo en América Latina, para escapar a los obstáculos aduaneros. Pero en los años 50 todo era distinto.
Era la época de la industrialización brasileña. El presidente Juscelino Kubitschek impulsó la construcción de la nueva capital, Brasilia, y aprobó grandes proyectos viales, mientras la industria automovilística florecía. En 1956 Kubitschek estableció las reglas del juego: Los fabricantes de automóviles tendrían que arreglárselas, tras una corta etapa inicial, sin la importación de piezas desde el extranjero.
Ese mismo año, Volkswagen comenzó a armar su primera fábrica, con todas las de la ley, fuera de Alemania, en São Bernardo do Campo, en las afueras de São Paulo. En septiembre de 1957 salía al mercado la primera furgoneta VW con un 50 por ciento de piezas fabricadas en Brasil. Dos años más tarde, saldría el primer Escarabajo o "Fusca", que resultó brasileño en un 95 por ciento.
Fusca y furgontea
Igual que en Alemania, el Escarabajo se reveló como un éxito de ventas en Brasil, el primer automóvil de bajo costo, responsable de la motorización de millones de brasileños. Más de tres millones se produjeron en total. Pero en 1986 –diez años más tarde que en Alemania- VW do Brasil frenó la producción del "Fusca".
Muchos más años sobrevivieron en Brasil las furgonetas T2. En Alemania, las T3, de líneas más perfiladas, sustituyeron a las redondeadas T2 desde 1979. El equivalente brasileño, el "Kombi", aún se sigue produciendo: solo en 2011 salieron al mercado 1,5 millones de estos vehículos. Pero sus días en Brasil están contados: hasta fines de 2013. Las "Kombi" no cumplen ya con las más modernas normativas de seguridad, argumenta Thomas Schmall, presidente de VW do Brasil.
¿Quién sabe si alguna vez se volverán a construir estas furgonetas en Brasil? Los Escarabajos, por ejemplo, tuvieron esa suerte entre 1993 y 1996, por iniciativa del presidente Itamar Franco, un reconocido hincha de los “Fusca”. Luego que el "New Beatle" no tuviera tampoco en Brasil el éxito esperado, VW do Brasil ofrece otro Escarabajo desde 2011, que ópticamente recuerda mucho más al modelo clásico.
Modelos de éxito
Con todo y el éxito de Escarabajos y furgonetas –algunos calendarios brasileños recuerdan la fecha en que comenzaron a producirse en el país-, no hay forma de que puedan competir con los récords del "Gol".
VW do Brasil desarrolló en1980 un modelo especialmente diseñado para América Latina. Lucía como una versión en miniatura del Passat de entonces y enseguida halló suficientes compradores. En 1987, cuando más bien parecía ya un pequeño Golf, alcanzó la cúspide de las ventas brasileñas. Y hasta hoy no ha perdido esa posición ni un solo año. Con más de 7 millones de automóviles fabricados, el gol es, con mucho, el auto más fabricado de todos los tiempos en Brasil.
Marca propia
El desarrollo de modelos propios ha convertido a Volkswagen do Brasil prácticamente en la una marca propia. Entre otras cosas, también porque la filial exporta con éxito sus creaciones. En Irak, por ejemplo, le llaman "Brazili" al Passat, pues la luneta trasera anuncia su origen: "Made in Brazil".
Volkswagen do Brasil tiene además otras innovaciones que celebrar: en 2003 se convirtió en la primera empresa en presentar un "Flex-Fuel" o vehículo de combustible flexible, con un motor que echa a andar con alcohol, gasolina o cualquier mezcla de ambos. El etanol se usa en Brasil hace décadas como sustituto de la gasolina, pero los sistemas que existían hasta entonces eran inflexibles. Entretanto, casi todos los fabricantes ofrecen en el país este tipo de modelos.
El presidente de Volkswagen, Martin Winterkorn, insistía el pasado octubre en la importancia del gigante sudamericano para su empresa, cuando lo definió como la "piedra angular de la Estrategia para 2018". Con esta estrategia, Winterkorn quiere convertir a VW en el mayor fabricante de automóviles del mundo en los próximos cinco años. Para VW do Brasil, esto se traduce en un ambicioso objetivo: aumentar las ventas, hasta entonces, en un 45 porciento; o sea, en 8 millones de automóviles anuales.
Autor: Carlos Albuquerque / Rosa Muñoz Lima
Editora: Emilia Rojas