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AI pide a Rousseff evitar represión violenta de protestas en Mundial

5 de junio de 2014

Amnistía Internacional (AI) exhortó al gobierno de Dilma Rousseff a evitar que durante el Mundial de fútbol de Brasil 2014 se repitan actos de violencia de la policía para controlar la ola de protestas populares.

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Imagen: Tânia Rêgo/ABr

Amnistía Internacional se remitió a las manifestaciones que sacudieron el país en la Copa Confederaciones de 2013. "La Copa del Mundo será un momento crucial para verificar si la policía y otras autoridades públicas de Brasil realmente entienden y toman en serio su obligación de respetar el derecho a la libertad de expresión y reunión pacífica", afirma la organización de derechos humanos.

La entidad elevó a Rousseff y al Congreso una petición con 87.000 firmas que expresa preocupación ante la ausencia de medidas para castigar a los agentes responsables de abusos y también ante la tramitación de proyectos de ley que, a juicio de AI, buscan criminalizar las manifestaciones populares.

“Respeto a la libertad de expresión”

Según el presidente de AI en Brasil, Átila Roque, durante el Mundial los ojos del planeta estarán puestos en todo lo que pase en el país, "y no sólo en los sucesos sobre la cancha". "El país tiene la oportunidad de demostrar que respeta los derechos a la libertad de expresión y manifestación pacífica en cualquier situación, incluso cuando recibe una gran cita deportiva internacional", agregó Roque.

Conjuntamente con la petición, la entidad divulgó un informe sobre los abusos practicados por la policía en la represión a las manifestaciones iniciadas hace un año. El documento titulado "'Ellos usan la estrategia del miedo': Protección al derecho de protesta en Brasil" denuncia, entre otras cosas, el "uso indiscriminado de las armas consideradas como menos letales, como balas de goma y bombas de gas lacrimógeno".

"La reacción de la policía a la ola de protestas de 2013 fue violenta y abusiva en muchas ocasiones. La policía militarizada usó gas lacrimógeno en forma indiscriminada contra los manifestantes incluso dentro de un hospital, disparó balas de goma en personas que no representaban amenaza alguna y golpeó a personas con bastones", dice el informe.

Como ejemplo, el texto apunta el caso del fotógrafo Sergio Silva, quien perdió el ojo izquierdo tras ser alcanzado por una bala de goma cuando registraba imágenes de una protesta popular realizada el 13 de junio en Sao Paulo.

Asimismo, la periodista Giuliana Vallone resultó herida por una bala de goma cuando ayudaba a una persona cerca del lugar donde se desarrollaba una manifestación. "Yo no estaba protestando, y en la calle no había manifestantes enfrentándose con la policía. Él (el policía) sencillamente apuntó el arma hacia mí y la disparó", relató la mujer.

El documento también expresa preocupación por proyectos que tramitan por el Congreso y que buscan "criminalizar" las protestas sociales. Entre ellos, destacó el proyecto de una ley antiterrorista que "contempla una definición de terrorismo tan amplia que, entre otras cosas, incluiría el daño a la propiedad o a servicios esenciales, causando temores a que pueda ser usado en forma indebida contra manifestantes".

Huelga de autobuses en Río de Janeiro, Brasil. (13.5.2014).
Huelga de autobuses en Río de Janeiro, Brasil. (13.5.2014).Imagen: Reuters

870 millones en aparato policial para el Mundial

Brasil ya tiene diversos instrumentos jurídicos para responder a actos de vandalismo y a conductas violentas. Añadir nuevas leyes con tal amplitud no sirve a los derechos individuales, ni tampoco a los intereses de la sociedad brasileña", apunta la entidad.

Brasil invirtió unos 870 millones de dólares en equipos y entrenamiento de los 150.000 policías y militares que integrarán el mayor despliegue de seguridad de la historia de los Mundiales. Pese a haber asegurado que las manifestaciones populares son "absolutamente legítimas", la mandataria hizo hincapié en que no permitirá que las protestas perjudiquen la cita, que se jugará en 12 ciudades brasileñas del 12 de junio al 13 de julio próximos.

"No admitiremos, realmente no admitiremos que haya cualquier tipo de desorden que busque impedir a las personas el acceso a la Copa del Mundo", dijo este martes Rousseff. "Nosotros estamos trabajando en forma muy intensa para que los jefes de Estado y de gobierno que vendrán a visitarnos -y son muchos-, las delegaciones y todos los hinchas, turistas y admiradores de fútbol tengan condiciones de seguridad", expresó.

CP (dpa)