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Armas bajo Control

JAG10 de octubre de 2003

Amnistía Internacional, Oxfam e IANSA han iniciado una campaña bautizada con este nombre para promover un aumento del control del comercio internacional de armas alegando abusos y violaciones de los derechos humanos.

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Objetivo: Control del comercio de armas.Imagen: AP

La cuestión es muy sencilla. El descontrol en el comercio de armas hace que a los delincuentes les sea fácil asesinar, a los soldados matar indiscriminadamente y a los policías arrebatar vidas arbitrariamente. Actualmente, las armas son más rápidas y poderosas que nunca. Y, en manos equivocadas, unas armas más rápidas y más poderosas significan más abusos y más vidas perdidas.

La expansión incontrolada y el uso ilegítimo de las armas son las causas de muchas de las violaciones de los derechos humanos. A pesar de esto, el control sobre el comercio internacional de armas es escaso. Oxfam, AI e IANSA (Red de Acción Internacional contra las Armas Ligeras) iniciaron el 9 de octubre en 21 ciudades de todo el mundo una campaña mundial con la que planean acciones en más de 60 países para concienciar a los ciudadanos y a los gobiernos de este problema. El objetivo que quieren alcanzar es la disminución del comercio de armamento y la prohibición de las armas que provocan abusos de los derechos humanos y amenazan el derecho de los pueblos.

El gran problema de las armas pequeñas

Al inicio de la campaña se presentó un informe en el que se mencionaban los siguientes puntos causados por el aumento y el abuso del comercio de armamento: Aumento de los conflictos, subdesarrollo, pobreza, violencia, miedo e inseguridad constante. Las armas ligeras, verdaderas "armas de destrucción masiva" que matan, mutilan y aterrorizan a diario, se mueven por el mundo sin ningún tipo de control. Matan cada año a 500.000 personas en todo el mundo y entre ellos cada vez más víctimas civiles. "La comunidad internacional tiene el deber de actuar y terminar de una vez por todas con este circulo diabólico del comercio de armamento, los abusos a los derechos humanos y el subdesarrollo. Es la hora de llegar a un pacto internacional para controlar la exportación de armas." dijo Barbara Lochbihler, secretaria general de AI en Alemania.

Paul Bendix, director de OXFAM en Alemania dijo que el comercio descontrolado conlleva fatales consecuencias para el mundo , sobre todo para los más pobres. "Los esfuerzos por conseguir un desarrollo sostenible caen en saco roto debido al abuso de las armas y a las entregas de armamento. Los políticos tienen que imponerse la tarea de garantizar a la humanidad la seguridad y la protección frente abusos" comentó Bendix.

Eine sichergestellte Handgranate und eine Maschinenpistole zeigt ein Zollbeamter
.Imagen: AP

El mal ejemplo alemán

A pesar de que la política alemana se considera restrictiva en cuanto a la exportación de armas, Alemania es uno de los mayores exportadores de armamento en todo el mundo. El gobierno federal concede cada vez más permisos para exportar a zonas en las que se producen abusos contra los derechos humanos, como las fábricas de munición para Turquía o Nepal. Alemania debería dar ejemplo y dejar que los hechos acompañen a la retórica opina el experto en armamento de AI en Alemania, Dr. Mathiasa John.

Pero no sólo Alemania es causante de los estragos que las armas provocan en el mundo. Los países que tienen un puesto permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, es decir, China, EEUU, Reino Unido, Francia y Rusia, son responsables del 88% de la exportación de armas convencionales.

La solución

Según las organizaciones que promueven la campaña, la comunidad internacional debe adoptar un tratado internacional sobre comercio de armas con fuerza legal antes de la Conferencia de la ONU sobre Armas Ligeras que se celebrará en 2006, que garantice que todos los gobiernos controlen el comercio de armamento de acuerdo con las normas internacionales. Un tratado que ayude a impedir que las armas caigan en manos de asesinos indiscriminados y de responsables de abusos y violaciones de los derechos humanos. Los gobiernos apenas ponen algo de su parte aunque son los responsables de los muertos y heridos.

Las anteriores experiencias como la campaña para prohibir las minas antipersonas han dado su fruto. Esperemos que los gobiernos responsables de los abusos sean conscientes y escuchen a la opinión pública para impulsar el tratado internacional sobre el comercio de armas.