Arsenal en el sótano
7 de julio de 2015El ruido de vehículos militares que atravesaban un barrio acomodado y tranquilo rápidamente atrajo el jueves pasado (2.07.2015) a una multitud de vecinos y espectadores. La gente se había congregado para observar el extraño espectáculo de un tanque del Ejército alemán remolcando a un tanque nazi por las tranquilas calles de la zona residencial de Heikendorf, cerca de la ciudad de Kiel, en la costa del Mar Báltico.
En un día extremadamente caluroso, veinte soldados del Ejército alemán (Bundeswehr) necesitaron nueve horas y dos grúas militares para sacar el tanque de 40 toneladas del sótano de su coleccionista, de 78 años de edad. Los soldados subieron el antiguo vehículo a un camión plano para llevarlo al área de entrenamiento militar de Putlos.
Ahora, fiscales de Kiel están investigando si el dueño del tanque de la Segunda Guerra Mundial posiblemente violó la Ley de Control de Armas de Guerra.
No obstante, la misión del Ejército alemán aún no había terminado, puesto que en el sótano estaba escondido otro vehículo militar, del tipo que generalmente suele encontrarse en museos militares: un cañón antiaéreo de 88 mm.
El abogado del dueño criticó que la dimensión de la operación de remolque había sido exagerada. “El tanque estaba desmilitarizado”, aseguró Peter Gramsch, remitiéndose a una declaración escrita del dueño fechada en octubre de 2005. Gramsch dijo que suponía que el tanque había sido dañado durante el remolque y que reclamaría una indemnización para su cliente.
El primero de julio investigadores habían descubierto el tanque Pantera en un sótano. Según reportaron, también confiscaron armas y un torpedo. Pocos meses atrás, el dueño del tanque había mencionado una colección en un búnker subterráneo en su propiedad a medio alemanes.
Al parecer, también había decorado su patio trasero con una escultura de bronce de la era nazi. Así fue como investigadores en busca de obras de arte robadas por los nazi se enteraron del dueño del tanque.