Arte moderno latinoamericano en Bonn
20 de septiembre de 2010
Al hablar de arte en América Latina, la mayoría de los alemanes piensa en imágenes de Frida Kahlo y Diego Rivera. Pero en el siglo pasado diversos artistas crearon pinturas y esculturas abstractas. Por primera vez, dichas obras se presentan en el marco de la exhibición Vibración, en la Kunsthalle de Bonn. Allí pueden apreciarse 200 obras de Joaquín Torres-García, Lucio Fontana, Julio Le Parc, Carmen Herrera y Carlos Cruz-Diez, entre otros.
“La abstracción es un arte que se originó en Europa en la modernidad, por eso la gente identifica la abstracción con Estados Unidos y Europa”, explica el curador, Juan Ledezma. Pero la percepción de la geografía del arte cambia. Desde hace diez años, varios museos se concentran en el arte moderno de América Latina y en las universidades también se investiga dicho tema.
Contexto principal: urbanización
La muestra Vibración presenta el impacto que tuvo la abstracción geométrica en la pintura y la escultura. Al mismo tiempo se visualiza la fotografía abstracta. Las corrientes más importantes fueron el Op-Art y el arte cinético en los años 60 y 70.
Las obras de la muestra surgieron en el contexto de la urbanización y el desarrollo económico que hubo en América del Sur en los años 30 y 40 del siglo 20. En la misma época, muchos europeos emigraron a países como México, Brasil o Argentina. Entre ellos hay también algunos artistas judíos que huyeron del régimen nazi en Alemania.
Dichos artistas tuvieron una gran influencia en el arte moderno latinoamericano. Vibración destaca por ejemplo a tres artistas judías que compartieron el mismo destino migratorio: Gertrud “Gego” Goldschmidt, Mira Schendel y Grete Stern.
Artistas judías en la mira
“Grete Stern trabajó en publicidad e hizo imágenes de fotomontaje surrealistas y dadaístas que son extraordinarias”, declara Ledezma. Stern administraba junto con su esposo, el fotógrafo Horacio Coppola, un estudio fotográfico. Fue un lugar de reunión para múltiples intelectuales, de los cuales hizo retratos que también se pueden ver en la muestra. Después de dedicarse al tema de la cuidad, documentó también culturas indígenas en Argentina.
Un representante del arte cinético era Carlos Cruz-Diez, realizador del cortometraje Movimiento y vibración en el espacio: Una escultura de Gego, que también se puede ver en la exposición Vibración. Protagonistas de aquel corto fueron esculturas de la artista Gego. Ella emigró a Caracas en el año 1939 y empezó a desarrollar estructuras reticuladas con alambres. En Vibración también se presentan obras suyas, como “Esfera N° 4”.
Vibración ofrece la oportunidad de observar la diversidad del arte abstracto latinoamericano. Es el comienzo del diálogo, que a partir de ahora no sólo se realiza entre Europa y Estados Unidos, sino también involucrando a América Latina.
Autora: Gözde Peşman
Editora: Emilia Rojas