Berlusconi: "un embrollo peligroso"

La Stampa, de Turín: “Quien aún recuerde los días de la dramática caída de Silvio Berlusconi en 1994 no podrá evitar constatar una pavorosa analogía entre los sucesos actuales y el fin de la llamada “Primera República Italiana”, hace 17 años. Claro que no está dicho que la segunda República tenga que terminar igual que la primera. Esta vez, la justicia no apunta a la clase dirigente de ese país, sino sólo al controvertido comportamiento del primer ministro, que sigue negándose obcecadamente a dimitir, a diferencia de entonces. Sin embargo, es obvio que el escenario es el mismo, sino peor. Se trata de una guerra que afecta a todos los niveles institucionales. Y todavía es difícil predecir adónde desembocará toda este embrollo.”

“Conflicto sin precedentes”

Neue Zürcher Zeitung, de Zúrich: “En este momento no se puede prever cómo terminará este conflicto sin precedentes. Berlusconi continúa refutando todas las acusaciones y desconociendo la competencia del Tribunal de Milán, además de argumentar que a los fiscales sólo los mueven motivos políticos. Para solucionar sus problemas con la ley, Berlusconi quiere utilizar, una vez más, su mayoría en el Parlamento, e intenta reforzar el apoyo de su socio de coalición, el partido Liga Norte, asegurándole la puesta en vigor del federalismo fiscal. Pero la base de la Liga Norte no parece estar de acuerdo con esa maniobra.”

“El futuro de Italia está en juego”

Luxemburger Wort, de Luxemburgo: “Silvio Berlusconi, el jefe de Gobierno italiano, un populista de derecha, es un empresario talentoso y posee una habilidad maquiavélica. Pero, en una democracia hecha y derecha, el poder y el dinero no deberían protegerlo de su responsabilidad ante la justicia. Al mismo tiempo, el principio de igualdad ante la ley debe valer también para Berlusconi. (…) No sólo está en juego el futuro político y personal del millonario milanés, sino, sobre todo, el futuro, la credibilidad y el prestigio de Italia en Europa y en el mundo. (…) Es por eso que Berlusconi no puede seguir huyendo de su responsabilidad política. Lo mismo vale para su responsabilidad como ciudadano: el primer ministro italiano debe ser puesto en el banquillo. Allí también tendrá la posibilidad de defenderse. Serán los jueces italianos quienes decidan si debe ir a la cárcel, después de haber tenido un juicio justo. Pero, para eso, debe ser posible someter a juicio a Silvio Berlusconi.”

Omar Suleiman: ¿un espejismo?

Die Presse, de Viena: “Quien piense por un momento que en Egipto podrá iniciarse una nueva etapa con el jefe de los servicios secretos, Omar Suleiman, se equivoca. Hasta que el presidente egipcio, Hosni Mubarak, lo nombrara hace dos semanas vicepresidente, Suleiman era el jefe del temido servicio secreto Mukhabarat, algo así como el verdugo mayor de Egipto. Con semejante pasado, su supuesta intención reformista no pasa de ser un espejismo.”

CP/ dpa

Editor: Pablo Kummetz