Bob Dylan, el primer rapero
18 de octubre de 2016A los 13 años me enamoré por primera vez perdidamente de un chico. Aún recuerdo esa oscura tarde de enero cuando, sentada en un viejo sofá de segunda mano, observaba a mi idolatrado poner en marcha el tocadiscos. Tras los primeros acordes, se empezó a escuchar una voz nasal y áspera: "The answer, my friend, is blowin' in the wind" ("La respuesta, mi amigo, solo la conoce el viento").
Esas palabras me llegaron al corazón. Y eso que, aparte del refrán, no entendía muy bien de qué trataba esa canción. Ese fue mi primer encuentro con Bob Dylan. Mi primer amor no duró. ¿Por qué? Solo el viento conoce la respuesta. En cambio, mi amor por Bob Dylan, sigue intacto. Hasta hoy.
La llave hacia un nuevo mundo
De ahí que me parezca grandioso que Bob Dylan finalmente haya ganado el Premio Nobel de Literatura. En los últimos 20 años, el que, probablemente, sea el cantautor más famoso del mundo había sido propuesto una y otra vez como candidato al premio, pero hasta ahora se había quedado con las manos vacías.
El jurado de 2016 fue el primero en reconocer que Bob Dylan "creó nuevas formas poéticas de expresión de la gran tradición de la canción estadounidense". Aprendí inglés con sus textos y canciones, con sus imágenes, personas, alusiones y citas. Y es que quería entender rápidamente de qué trataba "Blowin' in the wind".
Los textos de Bob Dylan también fueron para mí la llave hacia un nuevo mundo: Estados Unidos, el grande y contradictorio país natal del músico. Las letras de sus canciones mostraban la otra cara de la lisa fachada de EE. UU. que presentaban las películas y las series de televisión (desde "Vaselina" hasta "Bonanza" y "Las calles de San Francisco").
En sus canciones, Dylan criticaba el sueño americano y abordaba la situación de los inconformes, los oprimidos y las minorías. Conocí y admiré a Joan Baez, que en sus conciertos presentaba a Bob Dylan al público (al principio ella era más conocida que él), que interpretaba su canciones con voz clara y que durante algún tiempo fue su pareja. Descubrí a Bob Seger y Arlo Guthie, así como al cantautor austríaco Wolfgang Ambros, que interpretaba las canciones de Dylan en alemán.
El ídolo de una juventud
Todos ellos se diferenciaban claramente de lo que solía escucharse en casa en la radio. La música de Dylan y los cantantes estadounidenses de protesta acompañó mi adolescencia. Junto con ellos, protestamos contra la ampliación del aeropuerto de Fráncfort y el acuerdo de la OTAN para estacionar misiles nucleares en Europa Occidental. Traté de aprender a tocar "I shall be released" en la guitarra, y los domingos me encantaba escuchar "All along the Watchflower" a máximo volumen para molestar a mis vecinos. Me sentía libre, salvaje y rebelde. Empecé a interesarme por la guerra de Vietnam, por la política e historia. Gracias a Dylan y los cantantes de protesta, me convertí en una persona que piensa políticamente. Gracias por la banda sonora de mi juventud, Bob Dylan.
¿Y los jóvenes de hoy? Con motivo del cumpleaños 75 de Dylan, el pasado 24 de mayo, discutí intensamente con mis colegas si los jóvenes todavía lo conocen. Llegando a mi casa, se lo pregunté a mi hijo de 20 años. "Claro", me respondió. "Si Bob Dylan fue el primer rapero." No hay nada más que pueda añadir. ¡Felicidades por el Premio Nobel!
Autora: Susanne Spröer