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"El 'brexit' pone en peligro la paz en Irlanda del Norte"

Birgit Maaß
13 de diciembre de 2017

Jonathan Powell fue uno de los arquitectos del Acuerdo de Viernes Santo de 1998, que puso fin al conflicto de Irlanda del Norte. Con el "brexit", la paz en la isla está en juego, dice en entrevista con DW.

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Nordirland Protest gegen den Brexit an der britisch-irischen Grenze
Imagen: Getty Images/C. McQuillan

DW: Señor Powell, hace 20 años usted fue el jefe negociador en el proceso de paz en Irlanda del Norte. Logró convencer a católicos y protestantes de firmar el Acuerdo de Viernes Santo. ¿Lo ve todo en peligro ahora?

 Jonathan Powell: Sí, existe un peligro real. No volverán los grandes disturbios, pero estamos socavando el acuerdo político que logramos en ese momento. Eso sería una catástrofe. Donde hay fronteras, se necesita también a guardias fronterizas y esos podrían convertirse en objetivos de atentados. Habría más ataques y más caos. No tenemos una guerra civil en Irlanda del Norte, pero sí tenemos violencia. Hoy en día hay más murallas en Belfast que separan a la población que en el momento cuando se firmó el Acuerdo de Viernes Santo.

¿Por qué es la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte un obstáculo en las negociaciones sobre el Brexit?

Jonathan Powell, antiguo jefe de gabinete de Tony Blair.
Jonathan Powell, antiguo jefe de gabinete de Tony Blair.Imagen: DW/B. Maaß

Es un problema muy lógico. Si nuestro país sale del mercado único y la unión aduanera, y al mismo tiempo la República de Irlanda se queda, se necesitará una frontera, de lo contrario habría contrabando. No hace ningún sentido decir que podríamos abandonar la Unión Europea sin establecer controles en la frontera.

Pero el gobierno británico exige de la Unión Europea soluciones creativas y técnicas. Considera que a pesar del "brexit", los controles rígidos en la frontera no serán necesarios.

Ellos tratan pasar la culpa a la UE diciendo "nos gustaría tener una solución fantástica que no existe en ningún lugar del mundo, pero la Unión Europea no nos deja". Pero esa solución fantástica a base se tecnologías modernos no existe. Fíjese en la frontera entre Noruega (que no pertenece a la UE) y Suecia (que sí pertenece). Con soluciones técnicas puedes acelerar las cosas, pero aún así necesitas controles para revisar a los camiones, por ejemplo. Sobre todo en una frontera como la irlandesa, en la que hubo mucho contrabando en el pasado.   

¿Tiene un consejo para el gobierno británico?

Ser honesto a la hora de tratar de resolver un problema lógico. No pretender que existe una salida fácil, porque eso te hace perder credibilidad.

Durante los disturbios, la frontera irlandesa interior estaba estrictamente vigilada
Durante los disturbios, la frontera irlandesa interior estaba estrictamente vigiladaImagen: picture-alliance/dpa/P. McErlane

Ha costado un gran esfuerzo llegar a un acuerdo de paz en Irlanda del Norte. ¿Qué siente ahora? 

Me llena de desesperación. Irlanda del Norte ha determinado nuestras vidas por tanto tiempo. Siempre estuvo en los titulares. Fue un conflicto realmente sangriento que costó muchas vidas y que también tuvo un costo económico enorme. Si realmente nos tenemos que decidir por una frontera "dura", sería algo muy malo para Irlanda del Norte, Gran Bretaña y la República de Irlanda. Espero que la UE haga todo lo posible para evitar eso.

¿Cuál es el resultado más probable?

Personalmente, creo que al final nos quedaremos en el mercado único y en la unión aduanera. Yo sé que mucha gente lo duda, pero con el tiempo la gente se dará cuenta de las dificultades, y entonces la opinión sobre el "brexit" cambiará. Y en cuanto cambie la opinión pública, pronto cambiará también la opinión de los políticos.

Jonathan Powell fue jefe de gabinete del primer ministro británico Tony Blair y el principal negociador del entonces gobierno británico en el proceso de negociación previo al acuerdo de paz para Irlanda del Norte.   

Autora: Birgit Maaß, corresponsal de DW en Londres (GG/DZC)