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Caso Garzón en Berlín

24 de enero de 2012

Un congreso internacional de juristas condenó en Berlín el proceso contra el juez Baltasar Garzón e instó a revisar los crímenes del franquismo: “No se puede echar tierra y pasar página sin haberla leído".

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Protestas ante el Tribunal Supremo en Madrid.Imagen: Reuters

Mientras en Madrid comenzó el juicio a Baltasar Garzón por su investigación de los crímenes del franquismo, en Berlín tuvo lugar un congreso de juristas de distintas disciplinas que condenó por unanimidad el proceso que se realiza contra el juez que persiguió a Augusto Pinochet y a los ex represores argentinos. 

Raúl Zaffaroni, magistrado del Tribunal Supremo de Argentina y autor de la sentencia que anuló las leyes de impunidad conocidas como “Punto Final” y “Obediencia Debida”, y descongeló procesos judiciales por delitos de lesa humanidad y violaciones de los derechos humanos perpetrados durante el régimen militar argentino, se mostró alarmado. 

"Die Justiz ein verlorener Fall?" Kongress zum Richter Baltasar Garzon
El magistrado argentino, Raúl Zaffaroni.Imagen: DW

Mecanismo para una judicatura imparcial

Se está tratando de procesar a un juez básicamente por sus opiniones. Esto es una gravísima lesión a la independencia interna de los jueces”, advierte Zaffaroni en conversación con Deutsche Welle.

“Entre todos los jueces nos debemos un respeto recíproco, no tenemos jerarquías sino distintas competencias y responsabilidades en la estructura judicial. No importa si un juez tiene opiniones de derecha, de izquierda o liberales, cualquiera que sea la opinión del juez hay que respetarla porque la imparcialidad judicial es humana. Necesitamos un mecanismo que nos permita tener una judicatura imparcial”, afirma.

El magistrado argentino advierte sobre los daños que el caso Garzón significa para la justicia internacional. "Es un daño a la justicia española pero también para toda la judicatura europea y mundial. Si una persona de trascendencia pública como Garzón puede ser sometida a un proceso en estas condiciones, esto tiende a amedrentar a todos los jueces jóvenes que tienen iniciativas renovadoras. Es algo que tiende a congelar la jurisprudencia como una mera reiteración de decisiones y criterios ya decididos por órganos colegiados", subraya.

José Antonio Martín Pallín, magistrado retirado del Tribunal Supremo español, advirtió a su llegada sobre la atmósfera de tensión que se vive en Madrid en torno al caso Garzón. “Ha habido una concentración ante el Tribunal Supremo, es una situación que yo pensaba que no debía haberse llevado adelante pero la decisión del Tribunal ha ido en contra del derecho internacional sobre los Derechos Humanos”, aseveró.

"Die Justiz ein verlorener Fall?" Kongress zum Richter Baltasar Garzon
El ex magistrado español, José Antonio Martín Pallín.Imagen: DW

Brecha en la sociedad civil española

Pallín, autor del libro “¿Para qué servimos los jueces?”, destaca que más allá de lo que se pueda afectar personalmente a Garzón, que fue suspendido desde hace casi dos años de sus funciones como juez instructor de la Audiencia Nacional española y enfrenta 20 años de inhabilitación, lo más preocupante es que el caso abre una brecha en la sociedad civil española.

“Se trata del capítulo de la guerra civil y de los 40 años de dictadura que mucha gente ahora no recuerda pero Naciones Unidas nos equiparó con la Alemania nazi y la Italia fascista, o sea que fue una dictadura muy dura que no tiene precedentes en Europa en cuanto al exterminio sistemático de los vencidos. Esto no se ha sabido reparar”, afirma.

El ex magistrado, cuya ponencia abordó la “preocupación en torno a la credibilidad democrática”, advierte sobre las graves consecuencias del caso Garzón. “El mensaje es demoledor para las víctimas y es que ahí hay millones de víctimas, directas e indirectas. Ahora los que han tomado la bandera de la Memoria Histórica son los nietos, pero esto no va a acabar porque un país no se puede permitir echar tierra y pasar una página sin haberla leído. En España no hemos querido leer el pasado”, subraya.

El magistrado emérito del Tribunal Supremo instó a que se deje actuar a los jueces utilizando los instrumentos jurídicos displonibles. “Que se abran las fosas y como ahí se encuentran cadáveres que evidentemente tienen signos de violencia, que se abran procesos penales y se identifiquen a los perpetradores. Hoy en día los procesos de identificación de identidad son muy exactos por el ADN”, destaca. 

El jurista español recuerda que en los pueblos de España se sabe quienes son los asesinos. “Algunos de ellos presumieron de ello los 40 años de dictadura y, si están vivos, habrá que exigir la responsabilidad. Si son personas de avanzada edad no tienen por qué ir a la cárcel. Y si no están vivos, se declara extinguida la responsabilidad”, afirma. En dicho caso, explica, las víctimas son declaradas víctimas de un Estado totalitario y el Estado español tiene que asumir esa responsabilidad e indemnizarlas: “No va a refugiarse ahora en la crisis, como dicen algunos”.

Juez instructor y juez de investigación

Por su parte la fundadora de la Asociación de Abogados Alemanes en España, Catalina Garay y Chamizo, explica que el objetivo del encuentro es analizar con juristas de todos los ámbitos el tema de la judicatura, lo que tal vez permita pensar en la introducción en España de la figura del juez de investigación, que existe en Alemania, lo que en la práctica ha sido Baltasar Garzón desde la posición de juez instructor.

"Die Justiz ein verlorener Fall?" Kongress zum Richter Baltasar Garzon
La abogada Catalina Garay.Imagen: DW

Garay y Chamizo explica que Garzón ha dividido al país entre quienes lo odian y quienes lo admiran, lo que refleja algo de la idiosincracia española. “Siempre hemos rechazado a nuestros propios genios, como sucedió con Picasso o con Ramón Cajal. No sabemos apreciar a los grandes”, dice.

“En España la revisión del pasado sigue pendiente” señala y añade que eso fue lo que la motivó a traer el congreso de juristas a Berlín, a Alemania: “un país que ha revisado su pasado dos veces, tanto la división provocada por la Segunda Guerra Mundial, como cuando se produjo la reunificación”.

Autora: Eva Usi

Editora: Rosa Muñoz Lima