Cine argentino en Cannes 2011
15 de mayo de 2011La cinta española “La piel que habito” del director Pedro Almodóvar, que trata sobre un cirujano plástico vengativo es la única producción hispanoparlante que compite por la Palma de Oro, premio mayor del afamado evento fílmico que culmina este 22 de Mayo.
La presencia latinoamericana se encuentra básicamente en secciones paralelas no menos importantes como Un certain regard (Una cierta Mirada) que rescata producciones originales y diferentes. Aquí participan la cinta mexicana "Miss Bala" del cineasta Gerardo Naranjo y “Bonsai” del chileno Cristián Jiménez. Brasil también se hace presente con el primer trabajo de la dupla de realizadores Juliana Rojas y Marco Dutra, 'Trabalhar Cansa'.
En la “Semana de la Crítica de Cannes”, sección del festival cuyo propósito es descubrir jóvenes talentos, compiten el largometraje argentino “Las acacias” de Pablo Giorgelli, así como el cortometraje argentino-uruguayo, “La inviolabilidad del domicilio se basa en el hombre que aparece empuñando un hacha en la puerta de su casa” de Alex Piperno y la brasileña “Permanências” de Ricardo Alves Júnior.
Finalmente en la sección “Cinéfoundation”, que busca apoyar a la nueva horneada de cineastas internacionales, la presencia argentina destaca con el cortometraje “La fiesta de casamiento” de Gastón Margolin y el mediometraje del realizador argentino Mariano Luque, “Salsipuedes”. Luque que ya ha participado en la sección Cine en Construcción del último Festival de Cine de Toulouse en Francia conversó con DW-World.
Deutsche Welle: ¿Cómo fue que llegaste al Cinéfondation?
Mariano Luque: Me interesé por la sección a partir de lo que informan en sus bases en la web de Cannes y por sugerencia de un amigo argentino que ya había participado. Como era una sección abierta a escuelas de cine de todo el mundo, decidí enviar un DVD para probar suerte.
¿Qué significa para ti estar en un festival de prestigio mundial como Cannes con Salsipuedes?
Es una alegría muy grande poder participar en Cinefondation. Significa una gran ventana para poder darle visibilidad a la película en la que trabajamos. Además es muy emocionante poder asistir a funciones de las nuevas películas de muchos directores a los que admiro y han tenido mucha relevancia en mi formación.
¿Qué es lo que más te gusta del Festival de Cine de Cannes?
El encuentro entre amantes del cine, el cuidado y la calidad de las proyecciones, y la gran diversidad de películas de todo el mundo.
¿Por qué crees que este año no hay ninguna película latina en competencia como en años anteriores?
No lo sé y no creo que haya determinaciones según el origen de producción, el cine que se hace en Latinoamérica es muy diverso. Sí percibo una fuerte apuesta a la ficción – ficción, con mucho trabajo de representación, dejando un poco de lado el cine con límites difusos entre la ficción y el documental. Incluso hay varias películas con recursos de tipo fantásticos o provenientes del género de ciencia ficción.
¿De qué trata Salsipuedes?
Salsipuedes habla sobre la situación de una mujer treintañera que está de vacaciones en un bosque con su marido. La mujer tiene un moretón en el ojo, presumiblemente es el hombre quien le ha pegado. Cuando reciben la visita de la madre y la hermana menor de la mujer, todos se ocupan de banalizar y naturalizar el problema, intentando maquillar y cubrir el golpe para que ella pueda estar presentable. El trabajo se enfoca en la violencia verbal que ejerce la familia completa sobre la víctima, el ocultamiento, la complicidad, incluso por parte de la mujer.
¿Por qué una película sobre la violencia contra la mujer?
Primero, quisiera delimitar un poco el margen que intenta abarcar la película. En Salsipuedes existe un interés más enfocado en un tipo de violencia verbal que físico. La marca del moretón funciona como evidencia visual ante la cual ningún personaje reacciona. El tipo de violencia que he intentado representar la percibo como una problemática muy presente en mi entorno. Un estandarte naturalizado. Esta problemática ha surgido en el proceso de escritura de modo natural, no he pensado de antemano el tema para luego desarrollar las escenas y los diálogos, al contrario, fui escribiendo escenas con una serie de ideas sueltas. Estas ideas por lo general consistían en la reproducción de diferentes matices de diálogos que he escuchado en la calle, en el colectivo o con mis amigos. Siempre intentando respetar la jerga y los términos particulares de Córdoba, la ciudad donde vivo. En esta representación particular, hay un constante uso del humor para esconder la violencia verbal.
¿Cómo se mide el éxito de un mediometraje?
Personalmente reniego de la palabra “éxito”, más en una obra artística, donde todo es tan subjetivo. Como guionista y director del proyecto, estoy muy contento sólo con el hecho de haberlo podido llevar a cabo con un equipo tan comprometido y trabajador y por supuesto, tener la posibilidad de proyectarla. Las selecciones, premios o legitimaciones que vienen luego son un gran regalo de reconocimiento al gran trabajo que implica hacer una película.
¿Cómo esperas que reaccione el público de Cannes al ver “Salsipuedes”?
Trato de no esperar reacciones, si hay algo que me gusta de la realización es el comentario de los espectadores al ver un trabajo mío. Muchas veces, los espectadores detectan detalles que uno no tuvo en cuenta porque tal vez los naturaliza, y es así cómo la búsqueda artística y personal se va a afinando.
¿Después de este destacado comienzo en Cannes existe alguna historia en carpeta para llevar a la pantalla?
Tengo un guión escrito para un largometraje nuevo, estoy buscando fondos para su desarrollo. El proyecto consiste en la relación que tiene una joven que trabaja de empleada doméstica en la casa de su prima y su tía. Como actúan condicionadas por lazos familiares y a la vez laborales.
Autora: Pamela Schulz
Editor: José Ospina-Valencia