Contaminadores discuten plan medioambiental para sustituir a Kyoto
10 de septiembre de 2007
“Estamos de acuerdo en que los países desarrollados han de liderar decisivamente los esfuerzos por reducir las emisiones y sabemos que no todos los países en desarrollo son iguales, por eso el compromiso de los países tiene que diferenciarse según sus responsabilidades y capacidades”, dijo el ex presidente de Chile, Ricardo Lagos.
El plan tendrá un costo mínimo de 7.251 millones de euros anuales y contempla fases y velocidades de aplicación diferenciadas por países, explicaron en la capital alemana Ricardo Lagos, presidente del Club de Madrid y Enviado Especial de Naciones Unidas para el Calentamiento Global, y Timothy E.Wirth, presidente de la Fundación Naciones Unidas para Medio ambiente.
Limitar el calentamiento a 2 ó 2,5 grados
Los representantes del grupo mediador, ex líderes políticos, representantes sociales y empresariales, recomendaron reducir las emisiones globales de dióxido de carbono por lo menos en un 60 por ciento entre 1990 y 2050 con el fin de limitar el calentamiento del planeta a 2 ó 2,5 grados centígrados.
Además, puntualizaron que todos los países desarrollados, incluyendo de forma explícita a Estados Unidos, han de aceptar objetivos y plazos de cumplimiento. Por ejemplo, en un primer paso, hasta 2020, han de reducirse las emisiones en un 30 por ciento.
Según dicho plan, que incluye 11 recomendaciones, los países de industrialización rápida, como China e India, tienen que mermar su consumo energético un 4 por ciento anual hasta llegar al 30 por ciento en 2020 y a partir de 2021 habrán de empezar a reducir también sus emisiones de CO2.
España. México, Brasil, Costa Rica…
Además de la mitigación de las emisiones, el plan recoge otros tres puntos clave: adaptación a los efectos provocados por los cambios medioambientales en el planeta, urgencia de incrementar la transferencia tecnológica desde los países desarrollos a las naciones en vías de desarrollo y necesidades financieras para hacer frente a los costos derivados de la aplicación del plan, explicó Lagos.
El boceto fue ideado este fin de semana por un conjunto de ex jefes de Estado y de gobierno, así como importantes líderes empresariales y de la sociedad civil de más de 20 países pertenecientes al grupo llamado “Liderazgo Global para el Cambio Climático” (GLCA), formado por el Club de Madrid y la Fundación Naciones Unidas.
El objetivo de este grupo, en el que destacan Felipe González (España), Ernesto Zedillo, (México), José María Figueras, (Costa Rica), Gro Brundtland (Noruega), Kim Campball (Canadá) y Lionel
Jospin (Francia), es desarrollar un marco de trabajo para la cooperación internacional en la lucha contra el cambio climático.
Trabajo de convicción antes de Conferencia del Clima en Bali
El nuevo esbozo de plan post-Kyoto elaborado por el GLCA es presentado en Berlín este martes en el marco de la III Reunión del Diálogo de Gleneagles, en la que participan los ministros de Medio
Ambiente del G8 y del G20 (los 20 países que más energía consumen, entre los que figuran México, Brasil y España y el G5: la India, China, Sudáfrica, México y Brasil).
Los mandatarios políticos discuten estos tres días el mejor método de reducción de las emisiones de dióxido de carbono y buscan allanar el camino hacia el gran encuentro internacional de Bali, Indonesia, en diciembre próximo.
Aprovechando la celebración del Diálogo de Gleneagles del G8 en Berlín, las organizaciones alemanas Germanwatch y Oxfam, instaron a los gobiernos de los países que más energía consumen del mundo a ser consecuentes y cumplir sus promesas de reducir de forma real la emisión de gases de efecto invernadero y de combatir los efectos del cambio climático, sobre todo en las regiones menos favorecidas.