Contra el terrorismo: combate y estrategia

La Stampa, diario de Turín, anota: "Al resaltar la crítica región sudanesa de Darfur como un nuevo frente de la Yihad en contra de Occidente, en su reciente mensaje Osama Bin Laden ha dejado en claro la nueva estrategia de Al Qaeda: la voluntad de utilizar en su provecho las existentes guerrillas así como el intento de abrir un nuevo campo de operaciones militares en Africa […] Tres motivos hay para la transformación de Al Qaeda de autor de los ataques de las células terroristas de Madrid y Londres a actor en el campo de acción de las guerrillas árabes. El primero: Bin Laden conoce Sudán tan bien como Afganistán. El segundo: Los clanes árabes en el oeste de Sudán le ofrecen a los mujaidines una estructura semejante a la de Pakistán. El tercero: La cada vez más probable llegada de tropas de Estados Unidos y la Unión Europea ofrece un objetivo fácil".

El periódico Le Point, de París, comenta: "Inimaginable parece en realidad la perspectiva de una proliferación de armas atómicas en una región del mundo que muestra una tendencia al mesianismo. Los constructores de armas atómicas pakistaníes `contaminaron´ a Irán y Libia con sus conocimientos. Irán, a su vez, podría contaminar a otros países de la región. Escalofriante. Conclusión: ¿Todo conduce a un bombardeo de las centrales atómicas iraníes? Los riesgos se tienen ahora por altos. Como reacción, Teherán podría dirigir a la Hisbolá libanesa contra Israel, aumentar la agresividad de Hamás y dirigir a la aún moderada comunidad chiita de Irak contra Estados Unidos. Pero sobre todo podría organizar un terrorismo internacional, cuyo grado de peligro podría poner al de Al Qaeda en segundo plano".

El rotativo alemán Rhein-Zeitung escribe: "El intento de aplacar el terror es una experiencia frustrante para occidente. Esto ha sembrado furia y resentimientos, y preparado el campo para conceptos radicales. Y de hecho, Sarkawi y Bin Laden deben ser combatidos con toda la potencia militar. Sin embargo, la retaguardia del terrorismo sólo puede ser desactivada con una estrategia política. En Irak, Occidente debe mejorar las condiciones de vida de la población. Sólo así se desmigajará la base de los terroristas. Apenas cuando los iraquíes deseen defender su propio país de Sarkawi y compañía, porque vean peligrar sus nuevas libertades, los fanáticas perderán su cobertura. Entonces Sarkawi no podrá permitirse más el posar como una estrella pop ante sus encandelillados fanáticos".