Cuba aspira a la independencia energética
9 de diciembre de 2019
Por primera vez, una nueva ley permitirá la producción de energía por parte de productores independientes, tanto en hogares privados y personas jurídicas (cooperativas, pequeñas empresas, empresas estatales).
El Decreto-Ley 345, que entró en vigor a fines de noviembre de 2019, regula el desarrollo de las energías renovables y el uso eficiente de esta. Por ejemplo, los cubanos pueden comprar paneles solares para generar electricidad para su propio uso y vender sus excedentes de electricidad al sistema eléctrico nacional.
Se conceden préstamos de hasta el 100 por ciento del valor para la compra de las instalaciones. La venta de los aparatos y sus repuestos se realiza en tiendas seleccionadas, incluidas las nuevas tiendas de divisas. La instalación y el montaje son realizados por agencias gubernamentales.
Paneles solares, pero ¿para quién?
"Más del 90 por ciento de nuestros hogares consume menos de 300 kilovatios al año, y no sería rentable para estos consumidores comprar un sistema fotovoltaico utilizando su dinero efectivo actual o pidiendo un préstamo bancario", dice Tatiana Amarán Bogachova, directora general de electricidad del Ministerio de Energía y Minas (Minem). Sobre todo, porque el sistema a instalar ocupa espacio.
"Debido a la costosa tecnología y a las condiciones requeridas para su despliegue, esta será una alternativa más viable para los empresarios privados que tienen un alto consumo de energía", opina Amarán.
La empresa energética estatal Unión Eléctrica (UNE) tiene el deber de adquirir todos los excedentes de energía generados por fuentes renovables, independientemente del productor, a un precio establecido por el Ministerio de Finanzas. Este precio, cuyo objetivo es estimular la producción independiente, se basa, entre otras cosas, en los costos evitados por la generación de electricidad a partir de combustibles fósiles.
Los inversores extranjeros son bienvenidos
Amarán señala que la inversión extranjera en energía renovable se fomenta y apoya explícitamente mediante incentivos fiscales. "Todas las inversiones extranjeras relacionadas con la generación de energía se realizan a través de un contrato entre el inversor y la UNE, según el cual el inversor construye y opera el parque solar y vende la energía que genera a la red nacional, a la UNE", opina.
Para reducir la dependencia de los combustibles fósiles, Cuba planea aumentar la participación de las fuentes de energía renovables en la generación de electricidad al 24 por ciento para 2030. Actualmente, esta es del cinco por ciento.
Lázaro Guerra, director de Desarrollo de Unión Eléctrica, calcula que "gracias a las fuentes de energía renovables, este año se han producido 687.000 megavatios por hora, lo que equivale a un ahorro de 178.000 toneladas de combustible. Cuando el programa esté completado y todas las tecnologías relevantes para el año 2030 estén instaladas, esperan generar 7.000 gigavatios por hora de energía en el país, ahorrando alrededor de 1,8 millones de toneladas de combustible ".
Buscando petróleo antes las costas
Sin embargo, sin combustibles fósiles, el país no podrá funcionar en el futuro. Por lo tanto, la búsqueda de petróleo continúa en la costa cubana. La primera ronda de licitaciones, lanzada este año con la compañía china BGP para buscar petróleo en la costa cubana, se extenderá hasta 2021. Así lo afirmó Juan Andrés Barrizondo Ballester, gerente de exploración de la petrolera estatal cubana Unión Cuba Petróleo (Cupet), durante la tercera Conferencia de Energía, Petróleo y Gas de Cuba, en La Habana a fines de noviembre de 2019. "Estamos tratando de encontrar inversores para perforar, explorar y confirmar los recursos de la zona", dijo Barrizondo. La isla caribeña necesita capital y tecnología extranjeros para explorar los supuestos yacimientos frente a las costas de Cuba.
Gracias a los socios
Ya en 2017, Cupet dijo que las pruebas de perforaciones habrían demostrado la existencia de yacimientos de petróleo a gran escala en cuatro bloques de la Zona Económica Exclusiva de Cuba en el Golfo de México (ZEEC-GOM). La zona económica para la inversión extranjera en la costa oeste y suroeste de Cuba se estableció en 1999. El areal de 112.000 metros cuadrados se divide en 59 bloques.
Desde finales de 2016, se están llevado a cabo perforaciones exploratorias junto con socios de Canadá, Rusia, Venezuela, Angola, Australia y Vietnam, sin haber logrado mucho éxito. Roberto Suárez Sotolongo, director adjunto de Cupet, agradeció a los socios y proveedores extranjeros por resistir la presión de Estados Unidos y permanecer en el país.
El embajador del Reino Unido, Antony Stokes, dijo que una de las prioridades de su país está en el sector energético cubano: "Cuba ofrece grandes oportunidades y reconocemos el deseo del país de desarrollar este sector, lo que se refleja en el nuevo marco regulatorio. Estamos listos para encontrar nuevas formas de trabajar con Cuba".
(rmr/cp)
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