Derechos humanos en el festival de cine de Núremberg
8 de octubre de 2009
En muchos países del mundo las cámaras son temidas por los poderosos, percibidas como si de auténticas armas se tratara. Eso hace que el trabajo de periodistas y directores de cine se vea restringido seriamente en todas las latitudes del planeta. Un ejemplo impresionante de la represión padecida por los comunicadores se puede ver en la película Unwanted witness (Testigo indeseable), una producción suiza que investiga el estado de la libertad de prensa y la libertad de información en Colombia.
El protagonista de esta cinta es el periodista de televisión colombiano Hollman Morris, quien se ha dedicado durante varios años a observar al país suramericano y los efectos que la guerra civil, la corrupción y las graves violaciones de los derechos humanos han surtido sobre sus habitantes. “Es imposible resumir y describir el conflicto colombiano en un párrafo o en treinta segundos. Lo que allá tiene lugar es un drama humanitario de grandes proporciones”, comentó el propio Morris al presentar su trabajo en Perspektive, el festival de cine de Núremberg dedicado al tema de los derechos humanos que culmina este domingo (11.10.2009).
Más que noticias
Aunque Perspektive también exhibe películas de ficción como Gigante, del director argentino Adrián Biniez –una co-producción entre Uruguay, Argentina, España y Alemania que narra una historia de amor desde el punto de vista de personajes de la clase trabajadora–, Testigo indeseable se alinea con el paradigma de los documentales que los organizadores de este festival desean mostrar porque informan sobre los problemas de un país determinado y cómo su gente los vive, pero también dejan ver cómo es el proceso de rodar películas de talante crítico. Después de todo, los espectadores desean ver más que los típicos y breves reportajes de los noticieros de televisión.
La directora de Perspektive, Andrea Kuhn, pone como ejemplo las películas rodadas en África: “No solamente queremos mostrar al llamado ‘continente negro’, que ofrece de todo, desde genocidios hasta los niños soldado, sino transportar otra imagen de África. Nosotros mostramos cómo se defiende la gente, cuán activos son a pesar de tener las circunstancias en contra, cómo celebran sus éxitos”.
Irán en la mira
Este año, la programación del festival se ha visto dominada por filmes dedicados al Medio Oriente. El patrocinador de la sexta edición de Perspektive es el reconocido director de cine iraní Mohsen Makhmalbaf e Irán está en la mira de casi todos los directores. Petr Lom, el director checo residente en Canadá, es el único extranjero al que le fue permitido acompañar al presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, en sus giras por el interior del país en 2008; ahora tiene la oportunidad de presentar su película Letters to the President (Cartas al Presidente).
Aunque Lom no podía moverse del todo libremente mientras estaba rodando su cinta, las imágenes captadas por su cámara revelan un pedazo de la vida en Irán. Ahmadineyad tiende a ser venerado como un dios y sobre todo los sectores más pobres de la población cifran sus esperanzas de acceder a una mejor calidad de vida en el mandatario, quien sabe muy bien cómo aprovechar políticamente su cercanía con la gente.
Religión, tema omnipresente
El fanatismo religioso en el mundo musulmán es un tópico recurrente en el festival. Entre los filmes que trataron este tema sobresale Los niños del Corán del cineasta bengalí Shaheen Dill-Riaz; su mérito principal consiste en haber rodado en escuelas de Corán, instituciones que tienden a protegerse muy bien de la indiscreta mirada de las cámaras. Son reveladores documentales como Los niños del Corán los que hacen del festival de cine de derechos humanos de Núremberg un evento tan atractivo.
Autor: Jochen Kürten/Evan Romero
Editora: Emilia Rojas