Dimiten el presidente y el primer ministro yemeníes
22 de enero de 2015El presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, presentó su dimisión. Minutos antes de esta renuncia, el primer ministro yemení, Jaled Bahah, le había presentado también su dimisión a Mansur Hadi, describiendo la crisis que padece el país estos días como un "laberinto político" que le impedía gobernar con "eficacia". Ambas dimisiones empujan un poco más a Yemen hacia un precipicio político que podría suponer la reconfiguración de todo el país.
Ante la inexistencia de un vicepresidente y tal y como contempla la actual Carta Magna yemení, el el presidente de la Cámara de los Diputados, Yahia al Raie, se reunirá el sábado con los diputados para aceptar o rechazar la dimisión del todavía jefe de estado. En el caso de que la Asamblea Legislativa acceda, será el propio Al Raie quien asuma temporalmente la Presidencia.
Según dijo el secretario de la Presidencia, Yahia al Arasi, a la agencia española de noticias Efe, el hasta ahora jefe de Estado, Mansur Hadi, envió una carta a la Asamblea Legislativa en la que acusó a las distintas fuerzas políticas de "falta de responsabilidad" para llevar al Yemen "a buen puerto".
Mansur Hadi, quien se hizo cargo de la Presidencia del país el 25 de febrero de 2012 tras la renuncia de su antecesor, Ali Abdalá Saleh, que siguió a las protestas de 2011, lamentó sentirse "humillado" y haber pasado "grandes sufrimientos" durante su mandato. En su carta, Hadi advirtió de que lo ocurrido el pasado septiembre, cuando los combatientes del movimiento chií de los hutíes ocuparon varios puntos de la capital, Saná, "afectó el cauce normal" de la transición política en Yemen. El jefe de Estado, quien pidió perdón a todos los yemeníes, reconoció "no haber sido capaz de lograr los objetivos por los que aguantó un gran sufrimiento" durante estos años.
Los hutíes y el hasta ahora jefe de Estado llegaron ayer a un acuerdo de alto el fuego para intentar apaciguar la crisis, que está conduciendo al país a un posible conflicto armado. Los combatientes chiíes se han hecho con el control en los últimos meses de siete provincias de Yemen, incluida su capital, donde se recrudeció la tensión esta semana con el ataque a las sedes presidenciales.
RML (efe, dpa, reuters)