Dos alemanes consiguen pasar a semifinal
9 de abril de 2010
El Bayern Múnich en la Champions League, y el Hamburgo en la Liga de Europa, están a apenas dos partidos de acceder a la final de esos torneos; sólo el Wolfsburgo se quedó en el camino pese a las buenas opciones que tenía de ser el tercer club alemán en mantenerse en competencia. El fútbol alemán, dicen los expertos, registra el nacimiento de un proceso que promete aún más alegrías en el futuro.
En la Liga de Europa
El Hamburgo, club de la ciudad que acogerá la final de la Liga Europea del 2010, se acercó en la noche del jueves, sin demasiado esfuerzo, al sueño de disputar el título en su propia casa tras vencer de visita al Standard de Liége belga por 3-1; en su estadio ya había conseguido un 2-1 que le permitió de forma holgada asegurarse un cupo en la semifinal. El tercer gol del equipo de la ciudad porteña fue conseguido por el peruano Paolo Guerrero, quien desde ahora sólo estará a disposición de su club para partidos internacionales tras ser sancionado con una suspensión de 5 partidos de la Bundesliga por la comisión disciplinaria de la Federación Alemana de Fútbol, luego de haberle arrojado una botella a un espectador el pasado fin de semana.
En la semifinal de la Liga Europea el Hamburgo se las verá con el club ingles FC Fulham, encargado de dejar fuera de competencia al actual campeón de Alemania, el Wolfsburgo, al que venció en su patio por 1-0 con uno de los goles más rápidos de la historia de las competiciones internacionales del viejo continente: Bobby Zamora convirtió cuando apenas habían transcurrido 22 segundos del partido. El Wolfsburgo, que ya había sido derrotado en Londres (2-1) pero al que apenas le bastaba una victoria por la mínima diferencia para clasificarse a semifinales, no consiguió recuperarse de ese temprano revés y tuvo que despedirse del torneo.
Los del Hamburgo ya están advertidos de la peligrosidad de los ingleses, que a lo largo de su participación en la Liga de Europa se han encargado de eliminar a rivales fuertes: el campeón de la última Copa UEFA, el FC Shakhtar Donetsk; el poderoso Juventus Turín; y su más reciente victima, el campeón alemán.
En la Champions League
En el estadio Old Trafford del Manchester United el Bayern Múnich escribió en su historia, y en la de la Champions League, un capítulo que se recordará durante muchos años; en esas páginas se encuentra la crónica de un equipo que apenas transcurridos 41 minutos del partido decisivo en cuartos de final ya perdía 0-3, que prácticamente estaba eliminado, que no tenía futbolísticamente –por lo que se le había visto hasta ese momento- cómo responder a las embestidas de un rival evidentemente superior, que pese a las adversidades encontró el camino para recomponerse y al escuchar el pitazo final abandonó la cancha como vencedor, pese a la derrota 2-3.
El Bayern logró de forma casi increíble su cupo a la semifinal de la Champions League y ahora le espera en esa instancia un rival francés, el Olímpico Lyon, al que no se puede subestimar pues en su recorrido ha superado a equipos de gran envergadura: el Liverpool inglés, el Real Madrid con su constelación de estrellas (Cristiano Ronaldo, Kaká, Higuaín y cia) y al Burdeos, que ya en dos ocasiones derrotó a los muniqueses en la fase de grupos.
La Bundesliga mejora
Los resultados en las competencias internacionales han arrojado positivos resultados para el fútbol alemán, que en está temporada es considerado el segundo más importante en Europa, precedido sólo por España (un equipo en la Champions League, dos en la Liga de Europa), y superando a Inglaterra (ningún representante en la Champions; Liverpool y Fulham en la Liga Europea), e Italia (Inter Milán en la Champions League).
En la clasificación de la UEFA de la presente temporada Alemania ocupa la primera posición con 17.083 puntos, ello significa que en la valoración quinquenal se ascenderá a partir de agosto al tercer puesto en Europa y con ello se garantizará el cuarto cupo para la Bundesliga en la Champions League a partir del torneo 2011/2012.
Autor: Daniel Martínez
Editor: José Ospina-Valencia