Día Naranja: ONU exige el fin de la violencia de género

"La violencia contra mujeres y niñas es una pandemia global que destruye vidas, fractura comunidades y frena el desarrollo", señaló el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, en su intervención durante un acto con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Ban subrayó que el problema "no se limita a ninguna región, sistema político, cultura o clase social", sino que "está presente en todos los niveles de todas las sociedades".

El naranja de la solidaridad

"No hay más tiempo para la complacencia o las excusas. El momento de actuar ha llegado", señaló la directora ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka, quien llamó a mujeres y hombres a unirse a la campaña puesta en marcha por su agencia y a utilizar el color naranja en todo el mundo. Se trata de mostrar solidaridad con las víctimas durante los 16 días que separan este Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y el Día de los Derechos Humanos, el próximo 10 de diciembre.

En el acto intervino también el presidente del Consejo de la Judicatura de Ecuador, Gustavo Jalkh, quien subrayó la importancia de involucrar a los hombres en la lucha contra la violencia de género. "El miedo masculino es el origen de la violencia contra la mujer", recordó Jalkh, quien señaló que las agresiones también "destruyen la dignidad del agresor".

Según datos de las Naciones Unidas, un 35 % de las mujeres de todo el mundo han sufrido violencia física o sexual a lo largo de su vida, un porcentaje que se eleva al 70 % en algunos países. Las estimaciones señalan que del total de mujeres asesinadas en el año 2012, casi la mitad murieron a manos de sus parejas o de familiares.

Denunciar al agresor

Además, la mayor parte de los casos de violencia de género siguen sin denunciarse. Según un estudio llevado a cabo con 42.000 mujeres en la Unión Europea (UE), sólo el 14 % de ellas llevaron ante la Policía las agresiones físicas o sexuales sufridas.

Con el objetivo de concienciar sobre la necesidad de denunciar, la actriz estadounidense Teri Hatcher relató su experiencia personal en la sede de las Naciones Unidas. Hatcher, según explicó, sufrió abusos sexuales por parte de un familiar cuando tenía siete años, pero mantuvo el secreto hasta que escribió una carta a su madre a los 18 años. El vínculo con su tío se había roto ya ante las sospechas de sus padres, pero ellos tampoco lo denunciaron. Años después, una niña se suicidó en la misma ciudad tras haber sufrido abusos del mismo hombre, lo que llevó a Hatcher a romper su silencio para que el agresor pagase por sus crímenes. "Yo soy sólo una de tres mujeres que se ven forzadas a aceptar la violencia como parte de su historia vital", señaló la actriz, que subrayó la necesidad de acabar con esa estadística.

Regular para salvar a las mujeres

También la presidenta de la comisión de la Mujer del Parlamento Europeo (PE), Iratxe García, reclamó en esta jornada, junto a otros eurodiputados de distintos grupos, que la Comisión Europea (CE) ponga en marcha una directiva contra esta lacra y que el año 2016 sea considerado el año europeo contra la violencia de género. "La sociedad no va a entender que nos hayamos puesto de acuerdo para salvar a los bancos y no para salvar a las mujeres", concluyó.

Por su parte, la eurodiputada de UPyD, Beatriz Becerra, señaló la importancia de que todos los países de la UE -ahora solo lo hacen ocho- ratifiquen la Convención de Estambul contra la violencia de género. Mientras, otros diputados lamentaron que no exista consenso entre los Veintiocho para poner en marcha una legislación a nivel europeo sobre la violencia de género.

Entretanto, en República Dominicana, Nicaragua, Bolivia, Panamá, Honduras, Guatemala, entre otras naciones latinoamericanas, las mujeres marcharon para exigir el fin de la violencia de género y reclamar derechos como la despenalización del aborto.

Especialmente República Dominicana conmemoró este día, inspirado en su historia, con diversas marchas de mujeres en reclamo por sus derechos. La ONU universalizó esta conmemoración de cada 25 de noviembre mediante una resolución en memoria de la violencia política contra "Las Mariposas", como eran conocidas tres hermanas dominicanas de apellido Mirabal, fuertes opositoras de la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo.

RML (efe, dpa)