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El Antártico en peligro por acidez causada por polución

José Ospina Valencia7 de octubre de 2005

Las emisiones tóxicas causantes del efecto invernadero destruyen los ecosistemas oceánicos. El Antártico es la zona más afectada de la tierra. Sobre el tema DW-WORLD habló con el científico Reiner Schlitzer.

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Limacina, el caracol de alas podría desaparecer.


Una persona produce, diariamente, 11 kilos de bióxido de carbono. Dicho gas es el producto de la combustión de materias fósiles y es expelido a la atmósfera. Una vez en el ambiente, el bióxido de carbono contamina organismos humanos, animales, bosques, ríos y mares.

Los océanos son uno de los mayores catalizadores de la contaminación ambiental. "De los 11 kilos de bióxido de carbono producido, a diario, por los terrícolas, los océanos absorben 4", dice a DW-WORLD, el profesor Reiner Schlitzer, del Instituto alemán Alfred Wegener de Investigaciones Marinas y Polares, con sede en Bremerhaven.

Flora y fauna marinas: más susceptibles

La capacidad renovadora de los mares no es infinita. Aunque la absorción de gases tóxicos por parte de los océanos amortigua un tanto sus efectos, las aguas marinas reaccionan con su acidificación a la excesiva carga de bióxido de carbono. El océano más afectado por dicho efecto es el Antártico y los organismos en mayor peligro son los calcáreos, plantas o animales, habitantes de las gélidas aguas de las profundidades del cono sur.

Versauerung der polaren Meere
Oceáno Antártico amenazado por el monóxido de carbono. Foto: Instituto alemán Alfred Wagener

Sobre los efectos de la contaminación ambiental en los océanos la revista Nature publicó, recientemente, los resultados de un estudio internacional desarrollado por 27 oceanólogos, entre ellos, el profesor alemán Schlitzer y su equipo de científicos que aportaron diferentes modelos de calculación. Otros países europeos, Japón, Australia y Estados Unidos, estuvieron, igualmente, vinculados al proyecto.

Los expertos encontraron que en los mares, sobre todo en los polares, y "en particular en el océano Antártico, desaparecería la flora y fauna calcárea en 50 ó 100 años si el alto grado de emisiones contaminantes persisten", le confirma Schlitzer a DW-WORLD. Hasta ahora los cálculos partían de que dichos efectos se harían visibles mucho más tarde.

El hombre: víctima de sus propio invento

Ya que los organismos más afectados son una fuente importante de alimentación para crustáceos, salmones y ballenas, la cadena de afectados terminaría, tarde o temprano, regresando al hombre, el depredador y consumidor final de los frutos del mar. Amén de los efectos nocivos que se temen en los ecosistemas marinos de los polos.

Claro está que el mayor responsable de la acidificación de los mares es el hombre mismo y el excesivo uso de carburantes, por lo que los científicos involucrados en el estudio hacen un llamado a actuar a favor de una reducción de las emisiones.

Corales en peligro de extinción

Kaltwasserkorallen
Corales de agua fría como el caracol de alas es uno de los afectados por los ácidos provenientes de la contaminación Foto de Ifremer, Francia.

Si hay una mala noticia para los polos, hay una menos trágica para el trópico. "La composición de ácidos ocasionada por bióxidos de carbono es más lenta en los mares de aguas cálidas", expresa Schlitzer.

Pero no todo está seguro y menos en los polos. La concha de los caracoles de alas que vive en aguas frías, se compone de aragonito, una de las formas más difundidas de carbonato de calcio, atacado, directamente, por la acidificación.

Sólo si las aguas marinas contienen suficiente aragonito, los caracoles pueden sobrevivir. Según los cálculos científicos "las concentraciones de aragonito bajaran en todos los mares en el presente siglo". La amenaza es ahora real: grandes poblaciones de corales pueden desaparecer.

Los resultados del estudio deberían mover y conmover a activistas y políticos encargados de tomar las decisiones necesarias para frenar o parar la contaminación ambiental en todo el mundo.