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SPD, Los Verdes y La Izquierda ganan miembros por Trump

22 de noviembre de 2016

Donald Trump ganó las elecciones presidenciales en Estados Unidos. ¿Los alemanes están muertos de miedo? No todos.

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Imagen de la sede del SPD en Berlín
Imagen de la sede del SPD en BerlínImagen: picture-alliance/dpa/M. Gambarini

Mareike Graepel, periodista que vive en Haltern, Renania del Norte-Westfalia, pasó la noche del 8 al 9 de noviembre como muchos otros: frente al televisor. A la mañana siguiente tenía una decisión tomada. Se volvería políticamente activa y el primer paso consistiría en afiliarse al Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD). "Pensé: ¿cómo le explico a mis niños lo que ha pasado? Que ha sido elegido un presidente que no es un ejemplo a seguir para los jóvenes, y que no tiene amor por su prójimo.”

En otras ocasiones, la joven había pensado que ya era tiempo de ser miembro activo del SPD. Pero la elección del multimillonario estadounidense fue el factor decisivo. "Conozco a muchos estadounidenses, y su país me sigue pareciendo maravilloso en muchos sentidos. Pero pasó esto.” Mareike Graepel ha demostrado su compromiso social. En su localidad, lucha por la defensa de la política de asilo, y en la escuela de su hija, participa en el grupo de bienvenida a los refugiados. Recientemente, buscó propiciar el diálogo a través de las redes sociales con personas que piensan distinto. "Pero eso es demasiado complicado y el efecto se desvanece pronto”, afirma.

Simone Peter, duputada de Los Verdes.
Simone Peter, dirigente de Los Verdes (Archivo)Imagen: picture-alliance/dpa/B. Thissen

Decenas de nuevos miembros

Muchos ciudadanos en Alemania piensan igual que Mareike. Desde las elecciones presidenciales estadounidenses se han afiliado al SPD más de 1.300 personas, tan solo en la plataforma de internet del partido. Benjamin Seifert, vocero de los socialdemócratas, dice a DW: "De las 4 a las 9 de la mañana del miércoles, mientras los resultados se iban definiendo, captamos más de 70 afiliaciones.”

En un mes normal, el SPD registra cerca de 1.000 nuevas membresías, ya sea por internet, o en las oficinas locales del partido, o por teléfono. La proporción de solicitudes hechas por internet va del 40 al 50 por ciento. Así, las nuevas afiliaciones correspondientes a noviembre sumarían entre 2500 y 3000, y el mes aún no termina.

Normalmente, los partidos políticos, sobre todo el SPD, registran pérdidas continuas. Un estudio dado a conocer el pasado verano indica que los socialdemócratas son los que registran mayor disminución en sus bases, sobre todo debido a razones de edad. El orgulloso partido de Willy Brandt, que alguna vez llegó a tener más de un millón de miembros, hoy solo cuenta con cerca de 443000 "compañeros” y "compañeras”.

Efecto en Los Verdes

También Los Verdes registraron 114 nuevas solicitudes la noche en que se concretó la victoria de Donald Trump, y en los cuatro días posteriores, el total fue de 145. El incremento es notable en comparación con la actividad habitual. En la sede nacional del partido se piensa que a este aumento contribuyeron otros actores como la convención nacional que el partido ecologista llevó a cabo el fin de semana posterior a la elección  de Trump. O el furor por el proceso para elegir candidatos, proceso que siempre agita la actividad política.

Sahra Wagenknecht, diputada de La Izquierda. (Archivo)
Sahra Wagenknecht, diputada de La Izquierda. (Archivo)Imagen: picture-alliance/dpa/P. Endig

En la sede central de La Izquierda, en Berlín, Martin Bialluch, uno de los voceros de ese partido, contabilizó 314 solicitudes de afiliación en la semana que siguió a la victoria electoral de Donald Trump. "Es cuatro veces más de lo que captamos en una semana normal”, afirma. El jueves posterior a los comicios, La Izquierda llamó a los ciudadanos a afiliarse "para hacer frente a Trump y Marine Le Pen”. La acción encontró eco en 111 personas.

Distinto fue el panorama para la Unión Cristianodemócrata (CDU). En las bases del partido conservador no hubo movimientos fuera de lo normal tras el triunfo de Trump. La CDU de Merkel registró un crecimiento en sus afiliaciones luego de que el partido populista de derecha Alternativa para Alemania (AfD) lograra altos porcentajes electorales a principios de año en Baden-Württemberg, Renania-Palatinado y Sajonia-Anhalt.