Arsenal se “alemaniza”

En el prestigioso equipo de la capital inglesa están varias de las principales estrellas de la selección alemana de fútbol que disputará en este verano el Mundial de Brasil: el jefe de la defensa, el central Per Mertesacker; el genio creativo Mesut Özil; y el atacante Lukas Podolski.

Pero ellos no son los únicos alemanes en la plantilla del Arsenal, a su lado están otros tres prometedores talentos juveniles de Alemania: los mediocampistas Thomas Eisfeld (21 años), Gedion Zelalem (17) y Serge Gnabry (18). Con seis futbolistas Alemania es, junto a Francia, la segunda nacionalidad más representada en el Arsenal, donde juegan solo ocho ingleses.

El aporte alemán

Después de una década sin obtener el título en Inglaterra, y pasar el mismo tiempo oscilando entre las posiciones tres y cuatro de la Premiere League, un balance que no satisface sus ambiciones, el Arsenal parece haber encontrado en el fútbol alemán la fórmula para recompensar a su afición con un campeonato.

En el equipo titular están Per Mertesacker, quien se ha consolidado como el gran jefe de la defensa del club londinense; Özil, el encargado de aportar las ideas; y Lukas Podolski, jugador que pese a haber estado lejos de las canchas durante casi cuatro meses por culpa de una lesión es uno de los delanteros más efectivos del club con tres goles en apenas cinco partidos de la Premiere League, y dos en el único que ha disputado en la Copa FA.

Los juveniles, por su parte, hacen parte de la lujosa reserva que tiene a su disposición el entrenador Wenger, quien les ha venido introduciendo pasa a paso en las grandes competencias. El seleccionado alemán sub17 Gedion Zelalem, por ejemplo, debutó con el equipo profesional el pasado fin de semana y los analistas locales le han pronosticado un gran futuro, e incluso le llaman “el nuevo Fabregas”.

Junto a Zelalem, nacido y formado en Berlín y pretendido por las selecciones de Estados Unidos –donde residió hasta el 2007- y Etiopia –país de origen de su padre, un refugiado político en Alemania- está otro joven jugador que también ha recibido una oleada de elogios en Inglaterra: Serge Gnabry.

De él se ha especulado que será la gran sorpresa en la convocatoria de jugadores que llamará el entrenador Joachim Löw a integrar la selección alemana que disputará el Mundial de Brasil. Gnabry, nacido en Stuttgart pero con raíces en Costa de Marfil, hace parte ya de la selección Sub19 de Alemania y es considerado uno de los futbolistas jóvenes de más rápida evolución en Europa, algo que desea imitar Thomas Eisfeld, el mediocampista formado por el Dortmund que aún espera por su gran momento en el Arsenal, donde tiene un contrato hasta el 2015.

El papel del entrenador

“Esta es una de las mejores temporadas en la historia del Arsenal, hemos jugado con mucha constancia a lo largo del año” resumió el rendimiento de su equipo en la Premiere League el entrenador Arsene Wenger, quien ocupa esa posición desde 1996.

El francés es uno de los principales factores que han atraído a los jugadores alemanes a sumarse al Arsenal, no solo por ser alguien con quien ellos, extranjeros en Inglaterra, se pueden comunicar en su propio idioma, que Wenger habla a la perfección, sino también porque es una de las leyendas vivientes del fútbol internacional y uno de los entrenadores más destacados del mundo.

Wenger no ha ocultado su deseo de “alemanizar” aún más al Arsenal en el futuro inmediato. “Alemania produce muy buenos jugadores” reconoció el año pasado durante una visita en Dortmund, que fue su rival en la fase de grupos de la Champions League, torneo en el que su próximo contrincante, en octavos de final, será también de la Bundesliga: el Bayern Múnich.

Como prueba de ello el entrenador ha solicitado a las directivas del club el fichaje de uno de los talentos más destacados del fútbol alemán actual, Julian Draxler del Schalke. La negociación, de acuerdo a las informaciones de los medios ingleses, podría cerrarse esta semana, lo cual convertiría al Arsenal en el equipo alemán de Inglaterra.