El milagro del coche eléctrico

Pocas veces recibe una empresa recién fundada tanto capital inicial para impulsar su producto como la surgida de la visión de Shai Agassi. Con nada menos que 200 millones de dólares, el empresario israelí cuenta con una buena base para comenzar su proyecto y con unas expectativas de desarrollo que hasta hace poco nadie habría pensado.

Simples ideas que cambian el mundo

El plan es tan claro como simple. Bajo la denominación de Project Better Place, Agassi planea crear automóviles eléctricos en serie y hacerlos accesibles a las masas. Hasta aquí nada nuevo. Pero si la tecnología del motor eléctrico no ha progresado por los problemas que conlleva (poca capacidad de almacenamiento de las baterías y largo tiempo de recarga), Project Better Place está dispuesto a cambiarlo.

“Nuestra economía global necesita urgentemente un acceso a la energía y al transporte que respete el medio ambiente y sea sostenible. Necesitamos pensar en cómo reunir el consumidor, la tecnología existente, y el ecosistema del automóvil para crear la nueva generación de infraestructuras que provea de energía a los viajeros y no dependa de los combustibles líquidos”, comenta Agassi.

Como solución, la idea es crear una red de “gasolineras” para coches eléctricos y al mismo tiempo una especie de abono para conductores. Pagando una cuota mensual, el usuario podrá cambiar la batería vacía en cualquiera de estos establecimientos, recibiendo a cambio otra cargada. Así, una parada para la recarga duraría lo mismo que para llenar el tanque.

Propulsión barata y ecológica

“Sacando los automóviles de la dinámica del petróleo para convertirlos en autos eléctricos, la empresa podría reducir sensiblemente el impacto ecológico del tráfico. Los 700 millones de coches que ruedan por el planeta producen 2.800 millones de toneladas de CO2 anualmente, el 20% de las emisiones globales”, afirma la empresa en su página web.

“Utilizar la electricidad como medio de propulsión es mucho más eficaz ya que no genera fricción ni calor y ofrece un 90% de eficiencia en la transformación de electricidad en movimiento. Además, es mucho más limpia ya que no depende de combustibles fósiles, sino que también puede proceder de fuentes renovables”, continúa la empresa.

Ante la novedad del proyecto, normalmente habría que esperar hasta crear una infraestructura adecuada. Sin embargo, Agassi cree en su idea y ya planea las primeras pruebas para 2008. Según el modelo de negocio previsto, Project Better Place ayudaría a implantar este tipo de automóviles para alcanzar en 2010 una flota de 100.000 vehículos.

Si la sociedad se adaptará tan rápidamente al cambio o no es una pregunta que todavía queda abierta. Pero una cosa está clara: la apuesta es muy fuerte frente a la industria tradicional, que mientras tanto continua desarrollando la tecnología hibrida entre combustible y electricidad.