El Partido alemán La Izquierda criticó la liberalización comercial que la UE promueve en América Latina

"Doscientos años después de que tuvieran lugar los movimientos libertarios que condujeron a la independencia de la corona española, los pueblos latinoamericanos vuelven a levantarse para conquistar por fin su soberanía", se lee en la convocatoria realizada por el grupo parlamentario del partido La Izquierda.

"Se trata de una segunda revolución por la conquista de una soberanía económica, dichos países tienen que encontrar nuevas formas de cooperación entre sí, y ante potencias como Estados Unidos y la Unión Europea, relaciones que deberían estar basadas en un comercio justo", afirma el portavoz de Relaciones Internacionales del partido La Izquierda, Wolfgang Gehrcke, en conversación con DW-WORLD. "Estamos muy insatisfechos con la línea oficial de la Unión Europea con la que se va a la Cumbre de Madrid. No se puede hablar de una relación entre iguales", dice Gehrcke, quien moderó la discusión.

Discusión pública en el Bundestag

De cara a la Cumbre de la Unión Europea y América Latina y el Caribe, (EU-LAT) a celebrarse el 18 de mayo en Madrid, el grupo parlamentario del partido La Izquierda (Die Linke) convocó a un debate público en el que se discutieron las perspectivas de las relaciones entre la Unión Europea y los países latinoamericanos. En el encuentro participaron diputados de dicho partido, así como diplomáticos, sindicalistas, periodistas y activistas sociales latinoamericanos.

El partido La Izquierda presentó una moción ante el Parlamento alemán en marzo pasado, en la que pide que se incluyan los derechos humanos en la agenda política de la Comisión Europea en sus relaciones con Latinoamérica.

De cara a los acuerdos de asociación con Colombia, Perú y los Estados centroamericanos integrantes de la SIECA, (Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá, República Dominicana), la formación critica que los acuerdos contemplan una extensa liberalización de los mercados, subrayan el derecho de la libre competencia y la protección de inversiones y de patentes, propuestas que tienen el objetivo de interferir fundamentalmente en la política de ordenamiento de estos países, sin considerar cuestiones como los derechos humanos y la cohesión social.

Derechos Humanos en Colombia

El partido alemán recuerda en dicha moción que el Congreso de Estados Unidos y el Parlamento de Canadá detuvieron la ratificación de acuerdos parecidos con Colombia en vista de la mala situación de los derechos humanos en dicho país. "Siempre se habla sólo de libre comercio en estos tratados", dijo el líder del grupo parlamentario, Gregor Gysi. El diputado criticó la Política Agraria Común (PAC) de la Unión Europea, que no permite un comercio justo con los países de Africa, Asia y América Latina. "Ninguno de los países de estos continentes puede subvencionar sus productos por lo que no se puede hablar de un libre comercio, utilizamos nuestras subvenciones para ofrecer productos más baratos impidiendo que estos países puedan exportar sus productos porque resultan más caros", afirmó Gysi.

El diputado de izquierda y carismático orador, habló de las bondades de un subcontinente que acaba de visitar donde recorrió un total de ocho países. "Tienen una cultura sumamente interesante, todo el que viaja por esos países vuelve enamorado", dijo.

El líder de la formación explicó que mientras que la izquierda en Europa se descompone irremediablemente, con excepción de su partido en Alemania -en donde logró entrar al parlamento regional de Renania del Norte Westfalia, el estado federado más poblado del país, en las elecciones del pasado domingo-, su viaje a través de ocho países en América Latina le permitió constatar que hay ideas en la nueva izquierda latinoamericana que pueden traerse a Europa. "El neoliberalismo, acompañado por clases dominantes que se volvieron sumamente corruptas han dado como resultado una burda desigualdad social, una injusticia que la izquierda en América Latina no está dispuesta a tolerar. Tampoco en Europa. Eso debiera unirnos. Nuestra política está sumamente interesada en este desarrollo en América Latina y queremos ser solidarios poniendo bajo presión al Parlamento alemán", afirmó.

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No al acuerdo de libre comercio

El Embajador de Ecuador en Alemania, Horacio Sevilla Borja, recordó que diez de doce países de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), encargaron al presidente ecuatoriano Rafael Correa que transmitiera su indignación al presidente español, José Rodríguez Zapatero, anfitrión de la Cumbre y a la Comisión Europea, por la invitación al presidente hondureño Porfirio Lobo, y es por eso que no participará en la cumbre de manera oficial, aunque viajará a Madrid en donde mantendrá encuentros al margen. El diplomático ecuatoriano dijo que a su país no le interesa un acuerdo de libre comercio con la UE: "Queremos un Acuerdo de Asociación con tres pilares: diálogo político, cooperación científica y tecnológica y comercio justo para el desarrollo".

Por su parte, la activista hondureña Lorena Zelaya, líder del movimiento Bloque Popular, explicó la actual situación en el país donde sigue en pie un movimiento civil de resistencia que desconoce al gobierno de Porfirio Lobo al que llama "golpista". "Pese a que la resistencia sigue amenazada por el Ejército y de que los asesinatos están a la orden del día, el pueblo hondureño sigue firme en su propósito de proclamar una nueva Constitución", dijo.

Agenda de liberalización comercial

El sindicalista brasileño Kjeld Jakobsen, manifestó su preocupación porque la relación entre la Unión Europea y MERCOSUR (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay) tiene la misma agenda de liberalización comercial que ha beneficiado a las grandes empresas pero no ha aportado empleos ni bienestar a la población. "Es la misma agenda que no ha permitido que se cierre la ronda de negociaciones de Doha" dijo. El sindicalista abogó porque se busquen acuerdos equilibrados que garanticen que haya una simetría entre las dos regiones. Jakobsen recordó al auditorio que la Unión Europea tiene el doble de población que los países del MERCOSUR y su PIB anual es ocho veces mayor que el del bloque sudamericano.

El sindicalista calificó las relaciones entre ambos bloques como "la típica relación norte-sur", en la que tiene lugar un intercambio de bienes industrializados por bienes agrícolas primarios. "No puede haber un equilibrio basado en ese intercambio, y un acuerdo comercial así no lo queremos", sentenció.

El escritor e investigador colombiano Yesid Arteta, que viajará a Madrid representando la Escuela de Paz de la Universidad de Barcelona, un observatorio especializado en los temas de conflictos armados, señala que la situación en Colombia se ha complicado durante la gestión del presidente Alvaro Uribe, y que el conflicto se ha recrudecido. "En la periferia y en la zona selvática del país el impacto de esta confrontación es altísimo, produce numerosas bajas en el ejército y las fuerzas rebeldes afectando sobre todo a importantes núcleos de la población civil", afirmó.

El investigador recrimina el uso de las llamadas "minas quiebra patas", instrumentos de fabricación artesanal que están provocando un desastre muy alto. "Colombia es el país más afectado por minas anti-personas del mundo", concluye.

Autora: Eva Usi

Editora: Emilia Rojas