El Salvador cerca de resolver reapertura de caso jesuitas
15 de septiembre de 2020La Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador está cerca de resolver un recurso que busca anular la orden judicial de reabrir el proceso penal por la masacre de seis padres jesuitas y dos mujeres en 1989, informaron este lunes fuentes judiciales.
"El caso está, digamos, próximo a ser resuelto", indicó a la prensa el magistrado Leonardo Ramírez Murcia, miembro de la Sala de lo Penal, quien manifestó que "una serie de incidentes" retrasó el proceso, en alusión a dos recursos de recusación contra él y otra magistrada, que fueron resueltos por la corte.
Ramírez, quien finalmente fue separado del proceso, se abstuvo de dar detalles sobre los argumentos presentados por la defensa de los militares vinculados con la autoría intelectual del crimen.
Según el diario local El Mundo, la defensa de seis militares en este proceso pidió a la Sala de lo Penal, que no permita la reapertura del caso por tratarse de un "un hecho juzgado", por estar "prescrita la acción penal" y porque alegan no se trata de "delitos de lesa humanidad".
Juicio en España reavivó el caso
La reciente condena de 133 años contra el exviceministro de Seguridad Inocente Montano en España por el asesinato de los cincos religiosos originarios de ese país ha reavivado las discusiones en El Salvador de la urgencia de reactivar el proceso local.
Una corte de paz salvadoreña, a raíz de la anulación de una ley de amnistía de 1993 y a petición de la Universidad Centroamericana (UCA), ordenó reabrir el proceso, pero los recursos presentados por la defensa han retrasado el comienzo de las diligencias de la Fiscalía.
El fiscal general de El Salvador, Raúl Melara, pedirá a la Audiencia Nacional española una copia certificada del fallo contra Montano para "obtener más información" aportada por los testigos.
Único testigo del asesinato
En el juicio que enfrentó en España Montano, y cuya resolución fue dada el pasado viernes, testificaron Lucía Cerna y el teniente retirado Yusshy Mendoza, entre otros.
Cerna es la única testigo ocular del asesinato, quien tuvo que salir de El Salvador tras los asesinatos, y Mendoza fue condenado en este país a 30 años de prisión en un juicio que para la Justicia española fue simulado.
La madrugada del 16 de noviembre de 1989, en medio de la mayor ofensiva guerrillera registrada durante la guerra civil salvadoreña (1980-1992), un comando de soldados de elite mató a los religiosos en el campus de la Universidad Centroamericana.
Los jesuitas asesinados fueron los españoles Ignacio Ellacuría, Segundo Montes, Ignacio Martín-Baró, Amando López y Juan Ramón Moreno. También murieron junto a ellos los salvadoreños Joaquín López (sacerdote), la empleada doméstica de la universidad Julia Elba y su hija Celina Mariceth Ramos.
jc (efe, El Mundo)