Ucrania a las urnas
16 de enero de 2010Cinco años después de la victoria del movimiento democrático prooccidental en Ucrania, el segundo mayor país de Europa se encuentra ante un cambio de rumbo de cara a las elecciones de este domingo (17.1.2010), a las que se postulan 18 candidatos. La mayoría de ellos son partidarios de una mejora sustancial de las relaciones con Rusia y rechazan el ingreso de Ucrania a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) tras los caóticos años bajo el mandato de los líderes de la Revolución Naranja.
Los héroes de 2004, el presidente Víktor Yúshchenko y la primera ministra Yulia Timoshenko, no pueden alardear de haber logrado éxitos económicos y políticos pese al notable fortalecimiento de las libertades democráticas en la ex república soviética. Por muy indecisos que estén muchos electores, en Ucrania el tiempo de los "naranjas" parece haber llegado a su fin.
Yúshchenko, contra las cuerdas
Hasta el último minuto y sabiendo de antemano que tiene pocas posibilidades de vencer en los comicios, Yúshchenko lanzó peroratas cargadas de ofensas personales a su ex aliada Timoshenko: "Timoshenko es la muerte con una trenza", advirtió el presidente de 55 años, aludiendo al emblemático peinado de su contrincante.
El principal beneficiario de esa duradera lucha de poder es el líder de la oposición, Víktor Yanukovich, quien ahora luce como favorito para ocupar el máximo cargo político en el país. Sin embargo, de acuerdo con las encuestas, ninguno de los principales candidatos conseguirá la victoria en la primera vuelta electoral; para eso es necesario hacerse con el 50 por ciento de los votos. La segunda vuelta está programada para el 7 de febrero.
Yanukovich, favorecido por las encuestas
"Yúshchenko ya puede empezar a hacer las maletas", dijo en tono burlón Yanukovich al referirse recientemente al presidente. El líder de la oposición rebosa de confianza en sí mismo gracias a los buenos resultados obtenidos en las encuestas: 30 por ciento de intención de voto. En caso de ser elegido presidente, el político de 59 años pretende cambiar el rumbo hacia Occidente tomado por el país y convertir a Ucrania más bien en un "puente" entre Bruselas y Moscú. Para Yanukovich una victoria supondría también un triunfo personal: tras el escándalo por la falsificación de votos en 2004, fue derrotado por Yúshchenko en la repetición de los comicios.
Sin embargo, el candidato que podría determinar el resultado en la cita con las urnas es el ex ministro de Finanzas Sergei Tigipko, que en las encuestas ocupa el tercer lugar. El banquero asegura haber invertido 7,5 millones de euros de su fortuna particular en su candidatura y se presentó a la campaña como alternativa pragmática, describiéndose como el "hombre del mañana". Los analistas políticos dudan que el político de 49 años consiga participar en una segunda vuelta, pero opinan que, antes de que ésta tenga lugar, Tigipko podría influenciar el resultado de los comicios con una recomendación de voto.
Ucrania, entre la UE y Rusia
El presidente Yúshchenko luchó infatigablemente en las pasadas semanas contra las encuestas adversas a su candidatura y apeló a un discurso cargado de alusiones en contra de los rusos. El político, cuya cara está surcada de cicatrices tras ser envenenado con dioxina durante la campaña electoral de hace cinco años, es partidario del ingreso de Ucrania a las filas de la OTAN y la retirada inmediata de la flota rusa de la península ucraniana de Crimea. Yúshchenko no ha tenido empacho en tildar a Yanukovich y Timoshenko de agentes del Kremlin.
Por su parte, la jefa de gobierno de 49 años estabilizó recientemente las malparadas relaciones bilaterales con Rusia –agravadas por la disputa del gas– durante conversaciones con su homólogo ruso, Vladimir Putin, que transcurrieron sin desencuentros. Incansable, Timoshenko recorre desde hace semanas el país de 46 millones de habitantes.
Timoshenko, de promesa en promesa
Timoshenko promete un aumento de las pensiones y mejoras en el sistema sanitario en caso de lograr la victoria, aunque no explica cómo el país –actualmente al borde de la quiebra– podrá financiarlo. La primera ministra aspira a que Ucrania ingrese a la Unión Europea en 2015, pero los expertos no creen que Timoshenko esté en capacidad de alcanzar esa meta. Aún así, para la candidata del partido que lleva su nombre –Bloque Yulia Timoshenko– está claro que vale la pena continuar la campaña electoral hasta el último día. Y es que un elevado número de personas con derecho a voto continúa indeciso.
Por otro lado, la frustración alimentada por la crisis económica, social y política en el país es grande, y eso podría estimular la abstención electoral. Además, muchas personas temen que se practiquen fraudes durante los comicios. En general, son muy pocos los ucranianos que confían en que sus políticos puedan sacarles del caos postcomunista. Un chiste que actualmente circula por el país ilustra muy bien el clima imperante: "Papá, ¿todos los cuentos comienzan con 'érase una vez'?" – "No, hijo mío, los mejores cuentos comienzan con 'si Usted vota por mí…' ".
Autor: er / dpa
Editor: Pablo Kummetz