Elecciones europeas en Polonia, una prueba para Donald Tusk
5 de junio de 2024El gobierno de centro-izquierda de Donald Tusk lleva seis meses en el poder en Polonia. Sin embargo, el balance de ese faro liberal, una esperanza para todas las fuerzas proeuropeas, ha sido hasta ahora modesto. En la recta final antes de las elecciones europeas, el partido nacional-conservador de su archirrival Jaroslaw Kaczynski, Ley y Justicia (PiS), vuelve a liderar las encuestas, tras una caída temporal.
Para movilizar a sus votantes de cara a las elecciones al Parlamento Europeo del 9 de junio de 2024, Tusk recurrió a un método ya probado: convocó un mitín en Varsovia el pasado martes, 4 de junio. Hace un año, lanzó con éxito la campaña previa a las elecciones parlamentarias del 15 de octubre de 2023 con una manifestación masiva. Cientos de miles de personas respondieron entonces a su llamamiento, algunos incluso hablaron de un millón de participantes.
Mitín en Varsovia: Tusk moviliza a sus partidarios
El 4 de junio es una fecha simbólica en Polonia. Ese día, hace 35 años (1989), se celebraron las primeras elecciones parlamentarias parcialmente libres, que condujeron al colapso del sistema comunista. El martes, en la Plaza del Castillo de Varsovia, Tusk se refirió a este acontecimiento histórico.
"Entonces se trataba de que Polonia estuviera aquí, y no Rusia. Hoy luchamos para que no vuelva el antiguo orden (soviético)", dijo el jefe de gobierno. Advirtió contra una victoria de los partidos prorrusos en las elecciones europeas. "Créanme, para el Kremlin, la conquista política de Bruselas sería más importante que la toma de Járkiv", continuó. "No podemos dormirnos, no podemos rendirnos", advirtió Tusk ante unos 30.000 participantes.
Miedo a Rusia: hackers atacan la agencia de noticias polaca
Desde hace semanas, Tusk estiliza la campaña electoral como un conflicto entre Europa y Rusia. Acusa a los nacionalistas-conservadores en torno a Kaczynski de pactar con los partidos euroescépticos de Viktor Orbán en Hungría y Marine Le Pen en Francia. Según el primer ministro, estos desean debilitar a la Unión Europea y hacerle así el juego al Kremlin. Tusk calificó a los políticos del PiS en el Parlamento de "traidores a sueldo y servidores de Moscú".
Efectivamente, hay argumentos de peso a favor del temor a actividades hostiles rusas. Las autoridades de seguridad polacas sospechan que hay autores intelectuales rusos detrás de una serie de incendios en Varsovia y otras partes del país. También aumentan allí los ciberataques. La última víctima ha sido la agencia de noticias polaca PAP. Los piratas informáticos descifraron el sistema de seguridad de la redacción y publicaron un informe falso. El informe se refería a una supuesta movilización de 200.000 reservistas polacos que supuestamente iban a ser enviados a Ucrania.
Mayoría de polacos a favor de la UE
Polonia sigue siendo el país con el mayor nivel de apoyo a la UE. La última encuesta del Pew Research Center muestra que el 76 por ciento de los polacos está a favor de la integración europea, mientras que el 21 por ciento se muestra crítico con la UE. Sin embargo, los años de retórica antieuropea del PiS, sobre todo contra el Pacto Verde y la política migratoria, han dejado huella: hace dos años, la proporción de partidarios de la UE era del 89 por ciento.
Este domingo, los votantes polacos serán llamados a las urnas por tercera vez en ocho meses. Está por verse cuántos se quedarán en casa debido a la fatiga electoral. No es de esperar una movilización como la del 15 de octubre de 2023. En ese momento, casi el 75 por ciento de los votantes ejercieron su derecho, y a veces esperaron hasta altas horas de la noche frente a los colegios electorales para emitir su voto. Hasta ahora, la participación electoral en las elecciones europeas en Polonia ha oscilado entre el 20 y el 24 por ciento. Sólo en 2019 saltó a casi el 46 por ciento.
"La participación electoral será decisiva", escribe Michal Szuldrzynski en el diario Rzeczpospolita del miércoles 5 de junio de 2024. Ese es el motivo, explica el comentarista, de la controvertida comparación por parte de Tusk de las elecciones de la UE con la batalla por Járkiv en Varsovia. Aparte del miedo al PiS y a Rusia, Tusk no dispone de otras herramientas de movilización, opina Szuldrzynski.
(gg/cp)