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Europa gana fuerza

DW-WORLD8 de mayo de 2007

Algunos comentaristas europeos opinan que el nuevo presidente francés, Nicolas Sarkozy fortalecerá no sólo a Francia sino a toda Europa.

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¿El remedio europeo?Imagen: AP

Der Tagesspiegel, de Berlín: "El año pasado Angela Merkel era todavía una estrella solitaria en el firmamento europeo. (...) Ahora aparece Nicolas Sarkozy, un presidente francés llenó de energía y ambiciones. Esta semana Blair presenta planes para el traspaso de poder a Gordon Brown. De esta forma Europa vuelve a contar con tres pesos pesados, pragmáticos, que intentarán unir las fuerzas de occidente y no dejarán dividirse frente a temas como Rusia o Irán. Cuando George W. Bush se retire en dos años se reducirá la tendencia a buscar las fronteras de Europa en los límites estadounidenses. La elección del trasatlántico Sarkozy llega justo a tiempo."

Süddeutsche Zeitung, de Berlín: "La verdadera prueba de Sarkozy consiste en encontrar una interpretación moderna de la doctrina francesa, un lugar para su país en un tiempo en el que los bloques han dejado de funcionar, en el que las armas nucleares pueden ser producidas por cualquier terrorista y en la que la visión de la multipolaridad ya no es promesa de estabilidad a la luz de los impredecibles vaivenes de rusos y chinos."

Kölner Stadt-Anzeiger, de Colonia: "Los franceses también tienen a su Gerhard Schröder. El nuevo presidente Nicolas Sarkozy ha prometido liberar a Francia de sus telarañas. En Europa asumen los partidos conservadores la tarea de reformar y modernizar las sociedades. Esta nueva tendencia europea se puede comparar con el impulso de modernización de la década de los sesenta. La izquierda hizo los primeros pasos, pero cayó pronto en el papel de defender simplemente el status quo. La derecha, los conservadores se convirtieron en los portadores del cambio."

La Presse de la Manche, de Cherbourg: "Francia comprendió que en un mundo en cambio también hay que reformarse. El nuevo presidente Sarkozy le inyectará dinámica a este movimiento con su fuerza y voluntad. La izquierda conmovida por la gran derrota intentará reformarse en cuanto haya superado el periodo de luto. Se registra una modernización que llevará a la renovación del partido socialista que se ahoga por la inmovilidad producto de la confrontación entre sus líderes."