Fallecido político austríaco de extrema derecha ocultó millones

Mito, rumor y controversia siguen rodeando al antiguo líder de la derecha austríaca, Jörg Haider, aún dos años después de su muerte tras estrellarse el auto que conducía bajo efectos del alcohol en 2008.

El semanario político austriaco “Profil” reporta ahora sobre la investigación de una vasta fortuna privada camuflada en compañías fantasmas - muchas de las cuales han desaparecido tras la muerte de Haider.

Cuentas ocultas y empresas fantasmas

El descubrimiento se produjo en el marco de investigaciones sobre posibles casos de desfalco, fraude y soborno que llevan a cabo Alemania, Austria y Liechtenstein en torno a la venta de la entidad austriaca Hypo Group a la alemana Bayern LB, en 2007. Según el reporte de “Profil”, mientras el Gobierno austríaco trata de ordenar el desastre en el recién nacionalizado banco Hypo Group Alpe Aldria, que casi colapsa el pasado año, las autoridades habrían hallado cuentas secretas vinculadas a Haider en vida.

A través de 12 empresas ficticias con sede en Liechenstein, Haider habría depositado en el principado de Liechtenstein fondos por valor de hasta 45 millones de euros (59 millones de dólares), de los que en la actualidad sólo están disponibles 5 millones.

¿Conexión libia?

El semanario austriaco que ha destapado el escándalo afirma que los millones extraviados se han perdido en especulaciones en la bolsa de valores desde la muerte de Haider en octubre de 2008. “Profil” asegura además poseer información nueva sobre la presunta y ya antes rumorada “conexión libia” de Haider.

Se conoce que el líder derechista austriaco conocía a Said al-Gaddafi, hijo del coronel Muammar al-Gaddafi, pero el reporte de “Profil” sugiere que Haider recibió además efectivo en dólares como donaciones regulares para sus campañas electorales. Una fuente aparentemente cercana a Haider, que no fue identificada por la publicación, afirma que estos pagos habrían ascendido a entre 150.000 y 200.000 dólares.

“Luego dividíamos el dinero en cuotas pequeñas de aproximadamente 7.000 dólares y viajábamos por toda Austria para cambiarlos en euros en diferentes filiales bancarias. Ya sólo los gastos en pagos de comisión para el cambio eran una locura”, cita el semanario a su informante no identificado.

¿Campaña de descrédito?

Entre los cercanos a Haider en su vida política y privada todos ponen en duda la veracidad de los reportes de los medios. La viuda del político, Claudia Haider, aseguró a medios locales que no conocía la existencia de las cuentas en el principado pues tal dinero “no fue mencionado en el testamento”.

Entretanto, Stefan Petzner - mano derecha y sucesor de Haider frente al derechista partido “Alianza para el Futuro de Austria” - sugirió que alguien quizás pudo equivocarse intencionalmente en las cuentas: “¿Puede ser que alguien haya confundido euros con antiguos chelines austriacos?”, insinúo a la agencia local de noticias APA, para agregar luego que la historia podría ser parte de una campaña de descrédito de los partidos políticos austriacos tradicionales.

Luz verde a inversores desde el partido

Antes de su muerte en 2008, Haider era gobernador del cantón de Carintia, que una vez tuvo la sede y propiedad del Hypo Group. Carintia y un grupo de inversores principalmente alemanes y austriacos vendieron una participación mayoritaria de Hypo al banco alemán BayernLB en el 2007, en un acuerdo finalmente desastroso: Hypo fue nacionalizado de emergencia el pasado año para evitar su bancarrota.

En la investigación sobre la procedencia de la suma total y el destino de los millones ahora ausentes, los fiscales tratan de determinar si ex gestores, accionistas y socios comerciales de Hypo se enriquecían a expensas del desfalco de Hypo y BayernLB. Asimismo la investigación busca revelar si el partido de Haider aceptó sobornos a cambio de dar luz verde a la venta del banco. Según “Profil”, tres personas tienen acceso en la actualidad a las cuentas secretas descubiertas.

Autor: Mark Hallam / Rosa Muñoz Lima (AFP, dpa, Reuters)

Editora: Emilia Rojas Sasse