Eurovisión 2024: artistas contra la participación de Israel

Después de que hace unas semanas se alzaran las primeras voces contra la participación de Israel en el Festival de Eurovisión (ESC, por sus siglas en inglés), ahora también el país anfitrión del concurso musical de esta edición, Suecia, se pronunció al respecto: más de 1.000 artistas suecos, estrellas del pop y veteranos del concurso firmaron una carta abierta contra la participación de Israel en el evento.

Los firmantes critican que Israel participe a pesar de su "brutal guerra en Gaza". Su protesta se dirige a los organizadores del concurso, la Unión Europea de Radiodifusión (UER), que afirma que el concurso es apolítico. Pero esto parece cada vez más inverosímil: al fin y al cabo, la UER excluyó a Rusia del evento después del ataque a Ucrania en 2022 y a Bielorrusia un año antes, debido a sus atropellos de los derechos humanos y la libertad de prensa, se expone en la misiva.

Suecia ganó el concurso en 2023 y la final de 2024 se celebrará el 11 de mayo en Malmoe.

¿Evento musical apolítico?

Que el concurso musical no es tan apolítico como se afirma en las reglas de la UER, lo demuestran, una y otra vez, los eventos al margen de la competición. Esto quedó particularmente claro en Tel Aviv en 2019: la noche de la final, el grupo islandés Hatari mostró pancartas palestinas ante la cámara, causando revuelo. La emisora islandesa RÚV tuvo que pagar una multa de 5.000 euros a la UER. La cantante Madonna, esa misma noche, hizo subir las escaleras del brazo a un bailarín, con una bandera israelí, y a una bailarina, con una bandera palestina, durante su actuación. La cantante estadounidense dijo después que se trataba de un "mensaje de paz y unidad”. Sin embargo, la UER no se mostró nada entusiasmada al respecto.

Los británicos, que organizaron el festival de 2023 en vez de Ucrania, país ganador en 2022, tampoco se mostraron neutrales: las banderas azules y amarillas con las que estaba adornada la ciudad de Liverpool y el pabellón donde se celebró el evento, expresaban su solidaridad con el país contra el que Rusia libra una guerra desde hace dos años. En el escenario, sobre todo con los colores azul y amarillo, se recordó repetidamente la guerra en Ucrania.

Llamados a boicotear a Israel

Desde principios de 2024, la participación de Israel ha sido cuestionada por algunos países debido a la guerra en Gaza. 1.400 músicos finlandeses se han unido a grupos de artistas y activistas propalestinos en Finlandia y firmaron una petición pidiendo que Israel sea excluido del evento musical.

Dicen que no quieren que el Estado israelí maquille su imagen, participando en el espectáculo musical internacional, mientras libra una guerra brutal y viola los derechos humanos de su vecinos. Anteriormente se había llevado a cabo una campaña similar en Islandia; en Noruega, según informan los medios locales, manifestantes del "Aksjonsgruppa for Palestina" (Grupo de Acción por Palestina) se reunieron frente a la sede de la cadena de televisión NRK en Oslo y exigieron que Noruega también apoye la exclusión de Israel.

En Irlanda, un diputado laborista llamó públicamente a boicotear el Festival de Eurovisión si Israel participaba. Afirmó que Irlanda era el país con más éxito en la historia del evento y que, sin duda, sería escuchado por los demás países, que esperaba se abstuvieran también de acudir al festival. Pero el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, hizo retroceder al parlamentario.

El participante británico de 2024, Olly Alexander, firmó una declaración pro-palestina de una alianza queer, que describe los acontecimientos en Gaza como una "escalada del régimen de apartheid israelí". La embajada de Israel en Londres reaccionó inmediatamente: "Es muy preocupante, sobre todo en estos tiempos, la decisión de la BBC de enviar al Festival de Eurovisión a un participante que apoya puntos de vista tan parciales sobre Israel y propaga un lenguaje tan deshumanizante sobre los israelíes".

¿Por qué participa Israel en el festival de Eurovisión?

Israel debutó en 1973 en el llamado "Gran Premio de la Canción de Eurovisión". Desde entonces, el país es miembro de la Unión Europea de Radiodifusión (UER), una asociación que actualmente cuenta con 68 emisoras en 56 países de Europa, el norte de África y Oriente Medio.

Israel no es el único país no europeo que participa. También lo hacen Armenia y Azerbaiyán. Australia es desde 2015 el país "más exótico" del festival, porque tiene gran cantidad de seguidores del concurso y fue aceptado en la UER como miembro asociado.

Esta asociación de muchas emisoras y países, más allá de las fronteras europeas, es también la razón por la que el evento se llama "Festival de la Canción de Eurovisión" y no "Festival de la Canción Europea". Israel es uno de los participantes más exitosos en la historia de este festival: ganó cuatro veces, dos quedó en segundo lugar y otras dos en tercer lugar.

Israel no tienen aún representante para el festival

A pesar de la guerra en Oriente Medio, se están realizando preparativos para la participación de Israel en Malmoe. El formato de casting "HaKokhav HaBa - The Next Star", en el que los candidatos solicitan participar para ir al festival en Suecia, se pospuso debido al inicio de la guerra, pero todavía se lleva a cabo en intervalos irregulares. Sin embargo, se realiza sin público en vivo, porque una producción con tanta gente en un estudio de televisión sería demasiado peligrosa.

Hay una anécdota trágica al margen. Uno de los cantantes que llegó lejos en la preselección era un teniente que fue asesinado en la Franja de Gaza, apenas unas semanas después de su aparición en televisión.

En los medios israelíes, incluida la revista TimeOut, y en las redes sociales se planteó la cuestión de si un programa de este tipo era apropiado en tiempos de guerra. En particular, los familiares de los rehenes, que todavía están en manos de Hamás, critican el programa.

De momento, se continuará con la selección de los candidatos aunque de manera menos colorida y ruidosa. Los presentadores del programa explicaron que esta no será una temporada normal, se adaptará a la situación. "Pero estamos seguros de que un poco de música puede ayudar", dijeron.

(rmr/ers)