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Kent pone de relieve las divisiones del "brexit"

Abigail Frymann Rouch
8 de febrero de 2017

El Parlamento británico debate otorgar a Theresa May permiso para iniciar la salida de la UE. Abigail Frymann Rouch viajó a Kent a averiguar cuánto rencor y división existe todavía.

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Brexit Symbolbild Beführworter
Imagen: Getty Images/AFP/J. Tallis

Caminando por una calle de Canterbury se encuentra un carrito de comida vendiendo salchichas. "Todos se vuelven locos por la salchicha alemana en el mercado de Navidad”, cuenta el vendedor a DW, "así que decidimos venderla todo el año”. Ese amor por la "bratwurst" no equivale a un amor por Europa. Los votantes en esa ciudad del condado de Kent se dividieron casi por partes iguales a favor (51 por ciento) y en contra (49 por ciento) de la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).

Salchichas alemanas en Cantebury
Vendedor de salchichas alemanas en CanteburyImagen: DW/A.F.Rouch

Aunque el referendo de junio del año pasado planteó una pregunta de si y no, subyacía un amplio abanico de problemas. La campaña del "leave” urgía a los votantes a "retomar el control” en asuntos de inmigración, fronteras, infraestructura o gastos. Los defensores del "remain", que mostraron menos entusiasmo, esgrimieron razones como la estabilidad y solidaridad regional, las directivas de derechos humanos, el acceso de los inmigrantes al mercado laboral y a los mercados financieros,y el miedo a un futuro desconocido.

Gran Bretaña dividida?

El Doctor Chris Moreh, investigador del Centro para Cambio Poblacional de la Universidad de Southampton, dijo que el voto sacó a relucir las divisiones que venían acrecentándose durante "al menos una década”.

"El Reino Unido se siente más dividido después del voto del 'brexit' y cualquier precepción de división tiene verdaderas consecuencias sociales”, dijo el doctor Moreh a DW, agregando que durante los debates públicos sobre "brexit" en los próximos años la gente sentirá "que este se está convirtiendo en un país más cerrado, menos tolerante a diferencias de opinión, y generalmente más dividido.”

Cantebury tuvo una alta participación en el referéndum (75 por ciento) y muchos de los ciudadanos que hablaron con la DW indicaron que tuvieron discusiones fuertes con familiares, amigos y colegas sobre el tema, pero que esto ya ha pasado. 

Muchos expresaron frustración con respecto a segmentos del electorado. Kevin Burdett, trabajador publico jubilado, tuvo poca comprensión con los "jóvenes que no se molestaron en ir a votar” y que luego reaccionaron "quejándose” del resultado. Kelly, administradora que no dio su apellido, dijo que estaba "molesta” con los que votaron a favor del "brexit" sólo por la retórica emocional anti inmigrante. Hamish Dowlen, trabajador en servicios financieros de Londres, lamentó la falta de comprensión de muchos partidarios del "brexit" de la "relevancia crucial de la UE en nuestra compleja economía”. Culpó a los políticos y escuelas por no comunicar la importancia de la relación de Gran Bretaña con la UE. Un análisis de la BBC encontró que el nivel de educación, seguido por la edad, fueron los elementos determinantes en el voto. Las encuestas también han demostrado que muchos que votaron por la salida de la UE se han arrepentido.

Vista pragmática

Entre los votantes que habían optado por permanecer en la UE, el pragmatismo ha desplazado a la decepción. Catherine Parker, trabajadora en obras caritativas, ve las ventajas en "deshacerse de la burocracia de la UE”, mientras que Chris Ball, estudiante de teatro de 19 años, decepcionado por las mentiras de la campaña del "leave”, dijo que "ahora tenemos que seguir adelante manteniendo una relación estable con la UE, si es posible”.

¿Es posible? El diario The Guardian preguntó a un miembro del partido Tory en el parlamento sobre qué pasaría si no hay un acuerdo con la UE, a lo cual respondió que "hemos zarpado en una situación muy tormentosa”.

Ese pesimismo ha quedado atrás para los que apoyaron al "brexit" en Canterbury. "No me importa si no nos dan un buen acuerdo”, afirmó Lynn Fielding a DW. Su esposo Ray añadió que "nos gusta ser europeos, pero fuera de Europa.”

Greg Mayne
Greg MayneImagen: DW/A.F.Rouch

Board, propietario de bienes raíces, dijo a DW que estaba "absolutamente seguro de que Gran Bretaña logrará un buen acuerdo: las barreras comerciales quedaron en el siglo pasado, es esencial ahora para todas las naciones poder hacer negocios libremente, todos reconocemos eso.”

No obstante, Greg Mayne, un asesor de impuestos que votó por la permanencia, no estaba tan seguro, argumentando que "no tenemos la experiencia para negociar tratados de comercio, no lo hemos hecho en 40 años”. Dowlen, en un lenguaje más apocalíptico, dijo temer que dejar la UE fuera como "saltar del borde del precipicio económico hacia el abismo”.