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Grecia en la prensa europea

Emilia Rojas (CP)29 de junio de 2015

La crisis griega mantiene en vilo a la eurozona y acapara la atención de múltiples comentaristas europeos. Una selección de editoriales de los principales periódicos del Viejo Continente.

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Imagen: imago/ZUMA Press

Les Echos, diario financiero de París:

“Grecia está a partir de ahora en la fatal puerta de salida. Porque el escenario del “grexit” es lo que se ha puesto en marcha. Este lunes, los bancos permanecen cerrados en Grecia para evitar que los ciudadanos retiren euros en masa. El martes, el fisco no saldará las deudas que le corresponde pagar al Fondo Monetario Internacional. En los días siguientes, el Banco Central Europeo no podrá, por lo tanto, seguir elevando sus créditos para los bancos griegos, que se quedarán sin dinero. El domingo, los electores griegos probablemente votarán “no” en el referéndum sobre las reformas que demanda la Comisión Europea (…) El gobierno tendrá entonces que sacar billetes. Esa mala moneda desplazará a una buena”.

Die Welt, de Berlín:

“Hay muchos indicios de que Tsipras tenía desde un comienzo en sus cálculos un “grexit” como variante posible, quizá incluso atractiva para él. Es cierto que el grueso de la población griega quiere mantener el euro. Por ese motivo, el populista de izquierda rechazó una salida de la eurozona antes y después de su elección en enero. Pero sus maniobras tácticas de los últimos cinco meses hablan otro lenguaje. De pronto adquieren sentido retrospectivamente, si uno le atribuye un doble juego. Encendió los ánimos de su pueblo. El Fondo Monetario Internacional, el BCE y sobre todo la canciller Angela Merkel fueron presentados como enemigos. Tsipras necesita la leyenda de la traición contra su pueblo para tener posibilidad de mantener el poder tras la bancarrota del Estado”.

La Repubblica, de Roma:

“La decisión del gobierno de Tsipras de convocar a un referéndum sobre las propuestas de reforma del eurogrupo podría tener graves consecuencias tanto para Grecia como para la Unión Europea. La situación se les escapó a todos rápidamente de las manos, en un círculo vicioso que condujo anoche a anunciar que los bancos permanecerían cerrados. El detonante fue el anuncio de Tsipras de que se efectuará un referéndum, interpretado por los acreedores como una ruptura de las negociaciones. No se rompe sin más unas negociaciones tan largas y complejas, en el último minuto, a menos que se tenga el absoluto convencimiento de que ya no se puede confiar en la contraparte”.

The Times, de Londres:

“Las especulaciones sobre una salida de Grecia de la eurozona aumentan. Los gobiernos de los países de la eurozona difícilmente podrán frenar el proceso y verán como el gobierno de Syriza sigue empobreciendo a la población griega. Dado que es virtualmente imposible volver a introducir el dracma, es probable que un voto negativo en el referéndum convierta a Grecia en una especie de Montenegro: un país que no es miembro de la eurozona, pero que no tiene una moneda propia y utiliza el euro. Son perspectivas desoladoras para un país orgulloso e independiente, que un gobierno de motivación ideológica y carente de valor dejó en el suelo en apenas seis meses”.

Nesawissimaja Gaseta, de Moscú:

“La crisis griega se ha convertido en un terremoto político de consecuencias impredecibles. El 5 de julio, el pueblo ha de emitir en un referéndum su veredicto sobre las demandas de la UE, el BCE y el FMI. De este modo, Grecia decidirá sobre su propio destino. Pero, al menos de momento, la vía de las negociaciones ha fracasado. Sobre Grecia pende el peligro de la quiebra y la salida de la eurozona. La eurocrisis ha alcanzado así su clímax. Los países de la eurozona ejercieron tanta presión sobre Grecia, que el gobierno de Atenas está prácticamente arrinconado. En las principales capitales de la eurozona hay sesiones de emergencia, pero nadie sabe qué hacer: esperar, cerrar la puerta o tomar en consideración los ánimos griegos”.