Irak: reconstrucción en desacuerdo
11 de diciembre de 2003
El periódico de Bonn General Anzeiger opina: “Los comentarios del subsecretario de Defensa estadounidense, Paul Wolfowitz, no impresionan por su contenido novedoso. Bush ya había afirmado anteriormente la exclusión de la empresas procedentes de países en contra de la guerra iraquí. La escandalosa justificación de Wolfowitz es que sólo tomando estas medidas se pueden proteger los intereses de seguridad de los EEUU. Wolfowitz compara así a los adversarios de la guerra iraquí con saboteadores. Puede ser que el Péntagono tenga que difamar en estos momentos para poder ocultar los errores a la hora de restablecer el orden tras la guerra en Irak. Es una equivocación diplomática que ha dejado atónito al grupo opuesto a la guerra: Rusia, Alemania o Francia.”
EEUU necesita ayuda
El rotativo Financial Times expone la situación inestable en Irak: “Irak tendrá algún día que recibir un marco legal internacionalmente aceptado. Posiblemente sea mejor para Irak un mandato de las Naciones Unidas que la opción de que la ONU asuma la administración total. Esto ayudaría, en este complejo proceso, a que tarde o temprano instituciones y mecanismos de democratización y estabilización se desarrollen en Irak. Los EEUU necesitan ayuda para poder controlar una situación que nos puede amenazar a todos. Los EEUU deberían pedir ayuda y no ser tan orgullosos.”
Wolfowitz y sus comentarios
El diario francés Le Figaro critica los argumentos estadounidenses en estos términos: “El Pentágono no quiere contratar a empresas de países opuestos a la guerra iraquí. Lo contrario hubiese sido desconcertante. Lo desagradable para Francia, Alemania, Rusia y China es el carácter brusco del comentario. Paul Wolfowitz, como representante de los neoconservadores, considera relevante subrayar la protección de los intereses de seguridad de los EEUU. Se trata del reparto de más de 18 mil millones de dólares, y no de euros o rublos. De acuerdo, hemos entendido que el contribuyente estaunidense no financia nuestras empresas. Sin embargo, las repercusiones de las directivas de Wolfowitz son espantosas. Los Estados Unidos sólo podrán movilizar a un gran grupo de países, para llevar a cabo una tarea común en Irak, si olvidan las disputas del pasado.”
Países en desventaja
El periódico vienés Der Standard pone de manifiesto la situación desventajada de los países opuestos a la guerra iraquí:”Como si no fueran suficientes las amenazas de la guerra de Irak, los países contrarios a ella serán además castigados por los EEUU. ¿Competencia y economía libres? Sí. Pero no para los países que se atreven a llevarle la contraria a Estados Unidos. El Petágono, concretamente Wolfowitz, justifica la exclusión de empresas de países opuestos a la guerra iraquí en favor de la protección de la seguridad estadounidense. Es decir, el argumento de toda la vida. Vaya, así es como intenta internacionalizar la compleja reconstrucción de Irak.”