Kenia despide con honores a su fugaz estrella Kelvin Kiptum
23 de febrero de 2024
Camisetas con su rostro, himnos, flores y mucha tristeza... Kenia rindió este viernes (23.02.2024) un último homenaje durante un funeral de Estado a su estrella fugaz del maratón Kelvin Kiptum, plusmarquista mundial fallecido en un accidente de coche el domingo 11 de febrero, cuando apenas contaba 24 años y era uno de los favoritos para los Juegos Olímpicos de París.
El presidente de Kenia, William Ruto, y el presidente de la Federación Internacional de Atletismo (World Athletics), Sebastian Coe, se desplazaron para la ocasión a Chepkorio, en el valle del Rift (oeste), donde Kiptum nació, creció y murió. Ruto se situó cerca del ataúd abierto, frente al que se depositó un ramo de flores.
"En Kelvin vimos el futuro del atletismo en Kenia. Destacaba no sólo como un gran atleta, sino sobre todo como una buena persona. Era ambicioso, disciplinado y centrado", afirmó Ruto. El mandatario subrayó que Kiptum fue "un gran hombre y un campeón del mundo. Su muerte ha sido un momento muy duro", e instó a los atletas kenianos a hacer de París 2024 "una olimpiada en honor a Kelvin”.
Llamado a marcar época
Kiptum saltó a la fama mundial el pasado 8 de octubre, cuando marcó en su tercera carrera oficial, en Chicago, un crono de 2 horas y 35 segundos y rebajó con gran claridad la anterior plusmarca que poseía su compatriota Eliud Kipchoge con 2 horas, 1 minuto y nueve segundos, conseguida en Berlín el 25 de septiembre de 2022.
Tenía la meta de correr los 42.195 metros en menos de dos horas en el maratón de Róterdam, en Países Bajos, en abril. Los expertos estimaban que Kiptum estaba llamado a marcar una época en el atletismo y pocos ponían en duda que lograría romper la barrera de los 120 minutos. Su entrenador, el ruandés Gervais Hakizimana, destacaba que su pupilo corría 250 kilómetros a la semana, y a veces más de 300, cifras inusuales incluso al más alto nivel.
El domingo 11 de febrero, el vehículo que conducía el atleta se salió de la carretera en la localidad de Kaptagat, no demasiado lejos de su lugar de entrenamiento y residencia. Su entrenador también falleció en el accidente.
El cuerpo del maratonista será trasladado a la nueva casa que el presidente de Kenia mandó construir para Kiptum. Ruto también prometió en el funeral que, además de esta vivienda, va a ordenar la construcción de otra residencia para la viuda y sus dos hijos, y le va a conseguir un trabajo.
DZC (EFE, AFP)