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Kiev y prorrusos acuerdan cese de todas las hostilidades

7 de octubre de 2014

La medida, que ya está vigente, busca poner término a los últimos enfrentamientos registrados a pesar del alto al fuego alcanzado el 5 de septiembre.

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Imagen: Anatoli Stepanov/AFP/Getty Images

El 5 de septiembre, las autoridades de Ucrania y los rebeldes prorrusos que se alzaron en el este del país acordaron un cese de las hostilidades. Desde entonces, el trato ha sido violado una y otra vez, registrándose muertos y heridos en distintos ataques y escaramuzas. Incluso en el aeropuerto de Donetsk, el enclave rebelde, los enfrentamientos no han cesado en ningún momento.

Por ello cobra tanto valor el acuerdo alcanzado este martes (07.10.2014), donde las partes aceptan el cese de absolutamente todas las hostilidades en el este de Ucrania, sin excepción. El pacto está siendo respetado, según las autoridades ucranianas, que de cualquier modo recalcaron que en las 48 horas antes de que entrara en vigor el nuevo trato, los insurgentes han realizado ataques que han dejado cinco soldados muertos y 28 heridos.

“Hoy, 7 de octubre, según los acuerdos alcanzados, entra en vigor a partir de las 18.00 horas (hora local) el ‘régimen del silencio', en el transcurso del cual deben cesar todos los combates y cañoneos en la zona de la operación antiterrorista”, anunció el Consejo de Seguridad Nacional y Defensa (CSND) de Ucrania. No se informó de una confirmación de esto por parte de los rebeldes.

Observadores y drones

Por su parte, los rebeldes prorrusos justificaron sus ataques contra el aeropuerto de Donetsk, que habrían tomado al menos parcialmente, señalando que las fuerzas ucranianas usan ese recinto para disparar contra la ciudad. Kiev sostiene que los insurgentes lo que quieren es controlar la estratégica plaza, debido a su ubicación privilegiada. Los rebeldes también acusan al presidente ucraniano de haber dilatado la firma de la ley que concede un estatus especial a la región del este de Ucrania.

Solamente en las últimas 24 horas, siete personas murieron en combates tanto en Lugansk como en Donetsk, antes de que entrara en vigencia el alto al fuego que debería ser definitivo hasta que se alcance alguna solución política al conflicto. Poroshenko, en tanto, pidió a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) el despliegue de 1.500 observadores y 29 drones para supervisar el cumplimiento del alto al fuego.

DZC (EFE, dpa)