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Kirchner se queja de que Argentina sea peor calificada que España

14 de agosto de 2012

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner cuestionó a las agencias de calificación de riesgo crediticio por realizar una evaluación más crítica de Argentina que de España.

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Imagen: picture-alliance/dpa

"Es una locura calificar a la deuda de Argentina, con la voluntad y capacidad de pago que mostró, como más riesgosa que la española", dijo la jefa de Estado en el cierre del seminario "Políticas para superar el endeudamiento soberano", en el que también disertó el Premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz.

Kirchner indicó que su gobierno tomará deuda cuando la tasa de interés en el mundo sea conveniente para el país y no se encuentre en niveles "de locos".

En su exposición, realizada en la Facultad de Economía de la Universidad de Buenos Aires (UBA), la presidenta argentina reiteró que defenderá la aplicación de un modelo económico basado en la premisa "sostener la demanda agregada".

Además, utilizó un término del rugby al afirmar que Argentina "tiene que hacer un scrum en la región" sudamericana para enfrentar los efectos negativos de la crisis económica de Europa.

Al respecto, evaluó que la situación financiera en el continente europeo se debe a un "problema de liderazgo político" y a la "aparición de nuevos actores que tienen intereses que parecen contradictorios pero que no lo son tanto".

Kirchner expresó que el mundo vive "un capitalismo de casino" que sólo muestra preocupación "por salvar a los bancos".

"La crisis no es sólo una crisis de deuda ni de endeudamiento, sino que es una crisis política", aseveró.

En tal sentido, recomendó "regular los mercados y también los paraísos fiscales, porque de lo contrario estas crisis seguirán apareciendo de forma cíclica", pronosticó.

Por su parte, Stiglitz criticó el modo en que fue encarada la crisis financiera en Europa, al decir que "la austeridad ralentiza la economía y el beneficio fiscal que se espera siempre es una desilusión".

El economista estadounidense, que recibió el Nobel en 2001, se pronunció a favor de la creación de un sistema de quiebra para la deuda soberana, y respaldó la idea de que en una situación de default "son tan responsables los acreedores como aquellos que entregaron los préstamos".

dpa
Editor: Pablo Kummetz