La elite del automóvil
8 de agosto de 2002
Los clubes elitistas no son una novedad. Los hay varios en el mundo. En ellos, los aristócratas o el jet set suelen disfrutar, en grupos cerrados, de la compañía de sus afines. Es cuestión de status. De todos modos, llamó la atención el nacimiento de una nueva sociedad, dedicada a los millonarios al volante.
Pionero en Europa
Classic Driver Lounge es la primera agrupación de este tipo que surge en Europa. El requisito básico de admisión es poseer un automóvil de lujo, ya sea que se trate de una pieza de colección, un clásico, o de lo más innovador que ofrezca el mercado. Lo básico es que sea un lujo: más de 100 mil euros debe costar el vehículo, para abrir a su propietario las puertas del club.
La lista de los miembros, en consecuencia, incluye a grandes industriales, miembros de la nobleza, al igual que artistas y astros de la pantalla o el deporte. La nómina es confidencial, como corresponde. Pero no se trata sólo de dinero. Esta comunidad, que se autodefine como "la más exclusiva y elitista del mundo", aspira sobre todo a reunir a los amantes y coleccionistas de automóviles especiales, aquéllos que no se pueden comprar a la vuelta de la esquina.
Ventana virtual
La agrupación realiza diversas actividades. Una de las principales es publicar una página en internet, en varios idiomas. En ella no sólo se mantiene a los socios al tanto de las novedades, sino que también se brinda acceso a automóviles muy particulares. En esta plataforma virtual se ofrecen regularmente 5000 joyas de la historia automovilística, por un valor que se aproxima a 500 millones de euros.
La gama abarca desde autos de carrera hasta la marcas más nobles: Aston Martin, Bentley, Bugatti, Ferrari, Lamborghini, McLaren y Rolls Royce. En fin, todo lo que anhela el corazón de un amante de los autos se encuentra allí, incluyendo modelos que en realidad no existen y han sido fruto de transformaciones.
A diferencia del club, la página está abierta al común de los mortales, con excepción del "VIP-Showroom", donde se exhiben piezas únicas. El acceso está reservado exclusivamente a los socios de Classic Driver Lounge. A fin de cuentas se espera contar con ciertas garantías de solvencia y discreción.