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La nueva estrategia contra la pandemia en Alemania

Kay-Alexander Scholz
15 de diciembre de 2021

El nuevo gobierno alemán y su ministro de Salud, Karl Lauterbach, se proponen hacer muchas cosas mejor en la lucha contra la pandemia. Pero la tarea será igualmente difícil.

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El canciller Olaf Scholz y su ministro de Salud, Karl Lauterbach.
El canciller Olaf Scholz y su ministro de Salud, Karl Lauterbach.Imagen: Michael Sohn/AP/picture alliance

Alemania tiene un nuevo gobierno y un nuevo ministro de Salud: Karl Lauterbach. "En el pasado hablamos mucho sobre medidas, pero demasiado poco sobre una estrategia”, dijo el flamante ministro recientemente en un programa de TV. La estrategia actual es frenar la ola de la variante delta, luego aplicar la mayor cantidad posible de vacunas de refuerzo para proteger a la población de la variante ómicron y, posteriormente, evitar nuevas olas con nuevas vacunas.

Lauterbach, que es médico, prometió también involucrar más a los científicos en el combate contra el COVID-19.

Consejo de expertos

Estrechar la cooperación de políticos y científicos, y hacerla más transparente, es también el objetivo de un comité de expertos recién creado, que dependerá directamente de la Cancillería. Este consejo consta de 19 miembros de áreas como la medicina, la virología, la inmunología, la ética y la psicología. También lo integran el jefe del Instituto Robert Koch y el de la Comisión Permanente de Vacunación.

Según anunció Lauterbach, hasta Navidad habrá un posicionamiento con respecto a la variante ómicron. Pero las decisiones políticas las tomarán los políticos, y no este Comité. En noviembre de 2021, el presidente federal, Frank-Walter Steinmeier, ya había señalado que la ciencia no produce "certezas absolutas”, pero la política debe adoptar decisiones democráticamente legitimadas, fundamentarlas y hacerse responsable de ellas. Por eso, consideró "importante que los políticos den a conocer a qué expertos involucran en la toma de decisiones, qué hechos y valores toman en cuenta, y qué inseguridades e incertidumbres existen”.

Escasez de vacunas

La segunda novedad organizativa es el establecimiento de un equipo de crisis, que  también sería dependiente de la Cancillería. Un objetivo actual es coordinar mejor la campaña de vacunación. Su nuevo jefe es un general, Carsten Breuer, quien ya instó a mantener abiertos los centros de vacunación entre Navidad y Año Nuevo.

Las cosas podrían complicarse después. Según Lauterbach, un "inventario” dejó en evidencia que no se encargaron suficientes vacunas para los primeros tres meses de 2022. De acuerdo con informaciones de prensa, podrían faltar 60 millones de dosis. El ministro prometió negociar con los fabricantes para que despachen una cantidad mayor.

Si eso no da resultado, las autoridades tendrán que cambiar parte de la estrategia contra la pandemia. Porque, en ese caso, para la gente será difícil cumplir con una vacunación obligatoria como la que se está pensando imponer. De momento, solo ha sido tramitada en el Bundestag la obligatoriedad de vacunarse para el personal de hospitales y recintos de atención de ancianos y personas que requieren cuidados.

Manifestación de gente que niega la pandemia en Alemania.
Todavía hay gente que niega la pandemia en Alemania.Imagen: Sachelle Babbar/ZUMA Press/picture alliance

Problemas estructurales

La tasa de vacunación en Alemania se eleva, entretanto, a cerca de un 70 por ciento. La aplicación de mayores restricciones para los no vacunados ha servido para que volvieran a aumentar las inmunizaciones. Por estos días ya están disponibles también vacunas para niños de entre 5 y 11 años. Pero todo eso no será suficiente, según el ministro Lauterbach, que apoya el plan de una vacunación general obligatoria.

El gobierno tendrá que enfrentar también problemas estructurales de sistema sanitario, en el que hubo durante mucho tiempo recortes presupuestarios. Ahora, las autoridades se proponen abordar la política con respecto a los hospitales, para mejorar allí las condiciones de trabajo.

Además, ha de llevarse a cabo la largamente demandada articulación más estrecha de la medicina de urgencia y la atención ambulatoria. Se planea crear "centros de urgencia integrados”, para distinguir in situ entre las verdaderas emergencias y los casos más leves, con el fin de aliviar de esta manera la carga de las unidades de urgencia.

(ers/ms)