La fiesta continúa: Alemania 4 - Inglaterra 1
27 de junio de 2010Alemania jugó en Bloemfonteine un gran partido en el que demostró alto nivel de fútbol y poderío. Después de un 4 a 1, la alegría invade la cancha y también el territorio alemán, que se prepara ahora a seguir a su equipo rumbo a Sudáfrica en donde la oncena germana se enfrentará a Argentina.
Después de cerrar el primer tiempo con un dudoso 2 a 1, que en realidad debería haber sido un empate de 2 a 2, en la segunda parte los alemanes demostraron su poderío a los ingleses. A medida que afinaban su juego iban acallándose los cánticos británicos desde las tribunas de Blomfontaine, en donde los ingleses eran mayoría.
Neuer las para todas
Neuer, el portero alemán se mostró seguro a lo largo de los 90 minutos y logró parar casi todos los avances británicos. No así el portero británico James, quien tuvo que ver como el balón entraba en su portería dos veces más durante el segundo tiempo.
El concepto del entrenador Löw tuvo éxito, los germanos jugaron con rapidez e impusieron el ritmo a un equipo inglés muy experimentado. Los dos tantos en la segunda parte del juego fueron anotados por Thomas Müller.
La pasión del fútbol se siente en Bloemfontein
El primer tiempo en el estadio sudafricano de Bloemfontein se caracterizó por los cánticos británicos que ambientaban el estadio en el que se reunieron unos 48.000 fans. La lucha fue reñida, entre dos equipos que se respetan profundamente, un encuentro entre iguales, aunque los alemanes impusieron todo el ritmo.
Desde Berlín, la capital almena, en donde se tuvo que cerrar el ingreso al public viewing de la Puerta de Brandenburgo pues más de medio millón de personas se reunieron a pesar de temperaturas rondando los 35 grados, se festejó el primer tanto anotado por Miroslav Klose pasados apenas 20 minutos.
Al minuto 31 Podolski logró anotar el segundo tanto para Alemania. "Fútbol de lo mejor" gritó un moderador entusiasmado a los televidentes alemanes. "Aquí están nuevamente los alemanes, empiezan a escuchar al entrenador que ha recomendado hacer un juego rápido, mostrar el buen fútbol que saben jugar".
Fue un juego limpio sin muchos fouls, un juego de dos equipos que se respetan. Pero Alemania hizo bailar a una de las mejores defensas del mundo, a la de los ingleses.
En el minuto 36 el británico Upson anotó el único gol de los ingleses. Poco después un nuevo intento por parte de los ingleses, la pelota rebota en el dintel, es gol para los ingleses, pero el árbitro no lo puede ver desde el ángulo en el que se encuentra. Lo debería haber visto el asistente, pero errar es humano, el marcador sigue 2 a 1 a favor de Alemania.
Los fans alemanes que siguen el partido desde sus televisores lo saben, el marcador debió cerrar en empate al final de la primera parte, pero vale lo que decide el árbitro, el uruguayo Jorge Larrionda que da así a Alemania y Gran Bretaña un nuevo tema para discutir los próximos años.
La gran contienda histórica entre Alemania e Inglaterra finalizó. Alemania baila en el estadio y también en las grandes ciudades: en Berlín, en Múnich, en Hamburgo, en Colonia y muchas otras, las calles son conquistadas por las vuvuzelas vestidas de negro, rojo y amarillo. La fiesta continúa.
Autor: Claudia Herrera Pahl
Editor: Evan Romero-Castillo