"Los refugiados en Alemania necesitan una perspectiva"
2 de julio de 2013Unos 350 agentes policiales desalojaron este domingo (30.06.2013), el campamento que los refugiados había levantado en el centro de Múnich, llevando a 44 de ellos a diferentes centros hospitalarios. La intervención fue justificada para “poner coto a los peligros concretos que corrían las vidas de los manifestantes”.
La huelga de hambre de refugiados en Múnich muestra ante todo su miedo y falta de perspectiva en Alemania, opina el director de la organización de derechos humanos Pro-Asyl, Günter Burkhardt, en entrevista con DW.
DW: ¿Qué opina de esta forma de protesta?
Burkhardt: Ante la desesperación de los refugiados nos preguntamos qué tan grande debe ser su miedo y falta de perspectiva para echar mano de medidas tan drásticas. Pero, más que nada, nos conmociona la frialdad con que ha reaccionado el gobierno estatal de Baviera, o mejor dicho, el que no haya reaccionado. Hemos hecho un llamado a los políticos para eliminar las causas del problema.
¿Qué nos dice este desalojo acerca de la forma en la que las autoridades de Baviera y de Alemania tratan esta problemática?
Parece haber un desinterés en la situación en la que viven estas personas, porque los problemas no solo existen desde ayer. Desde hace años se conoce la situación tan escandalosa en la que viven los desplazados en Alemania y, especialmente, en Baviera.
¿Por qué especialmente Baviera?
En casi todos los estados federados, excepto en Baviera, se aflojó la obligación de residencia, es decir, la obligación a permanecer en un lugar. Además, allí todavía existe el alojamiento en grandes campamentos aislados. Nosotros queremos que los refugiados puedan pagar su propio sustento, pero para ello tienen que trabajar y aprender alemán. La encargada de integración, Maria Böhmer, por ejemplo, apoya este tipo de propuesta de integración. En Baviera, en cambio, la rechazan.
Pero no solo hay protestas de refugiados en Baviera. Entonces, ¿cuáles son las deficiencias del derecho de asilo alemán?
El derecho de asilo alemán tiene dos fallas: por un lado, está la política de aislamiento de los refugiados, el alojamiento en grandes campos de acogida y la poca disposición a concebir un concepto de integración para ellos. Por otro, hace falta un derecho de asilo a nivel europeo que realmente proteja a los refugiados. En un procedimiento de asilo, hasta ahora, el responsable es el primer país al que entró el refugiado. Entonces, si un refugiado pide asilo en Alemania, intentará ocultar su trayecto de fuga por temor a ser expulsado del país. La primera pregunta que se le hace a un refugiado es: ¿Cómo llegaste aquí? Pero la pregunta debería ser: ¿Por qué?
Hace poco, la Unión Europea acordó un derecho de asilo europeo. ¿Cree que mejorará la situación de los refugiados que piden asilo en Europa?
Lo que no cambiará es que los peticionarios solo podrán solicitar asilo al primer país de la Unión Europea al que entren. Los países fronterizos seguirán cargando con la responsabilidad estructural, y una de las consecuencias es que allí los refugiados sean detenidos o mandados de regreso a sus países de origen. Además, este sistema de petición de asilo prevé, por ejemplo, el derecho a detener a un refugiado en caso de que no se pueda comprobar su identidad. Pero la mayoría de los refugiados no tiene pasaporte. Por ello, estamos muy descontentos con el derecho de asilo europeo.
Según una reciente estadística de la Agencia de la ONU para los Refugiados, Alemania es el segundo país con más peticiones de asilo. ¿Por qué?
En el caso de los sirios y afganos, por ejemplo, resulta que muchos de sus familiares, conocidos y paisanos ya viven en Alemania. Pero el 80 por ciento de los refugiados en todo el mundo se queda en su región de origen. De hecho, Europa da asilo a muy pocos refugiados.
Autor: Jennifer Fraczek/ VC
Editor: Emilia Rojas Sasse