La noticia de la escasez de mano de obra cualificada en el sector asistencial se ha extendido por toda Albania. Con la esperanza de un futuro mejor, muchos enfermeros cualificados abandonan su país. Alketa Kaja, de 22 años, aprende "enfermería en alemán" en Tirana y se está preparando para su nueva vida. Una clínica alemana le paga el curso de idioma y le ofrece un trabajo. Sólo el cincuenta por ciento del personal cualificado de enfermería permanece en Albania. Uno de ellos es Kastriot Qehaja. Aunque su trabajo es agotador y poco rentable, no quiere abandonar su país. ¿Quién si no cuidaría a los ancianos cuyos hijos trabajan en Europa occidental?