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"El 'EI' es un pacto entre criminales"

Kersten Knipp (LGC, JOV)5 de septiembre de 2014

Para Aiman Mazyek, presidente del Consejo Central de los Musulmanes en Alemania, el EI es una organización mafiosa que no se deja presionar con argumentos religiosos.

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Irak islamischer Staat Kämpfer Januar 2014
Imagen: picture-alliance/AP Photo

Deutsche Welle: Sr. Mazyek, permítanos empezar por una pregunta personal: ¿Qué sensación le producen las noticias de Siria e Irak?

Aiman ​​Mazyek: Tristeza, confusión y abatimiento. Por la gente que ha salido a la calle en la llamada Primavera Árabe para defender los derechos humanos y la democracia. Querían tener una vida mejor. Y ahora vemos que las fuerzas del antiguo régimen de nuevo los oprime, acosa y asesina.​​ La falta de unas efectivas fuerzas del orden dejó un vacío que aprovecharon los grupos terroristas. Así que es una especie de doble castigo. No solo la lucha por los valores indicados no tuvo éxito, sino que casi es peor ahora.

Aiman A. Mazyek Podiumsdiskussion Judisches Museum Berlin
Aiman Mazyek: "El Profeta se describió como intercesor contra los musulmanes que creían que podían oprimir a otras minorías".Imagen: yunay.de

Los terroristas del 'Estado Islámico' dicen actuar en nombre del Islam. ¿Qué piensa de esta afirmación?

El fenómeno siempre existió, los mercenarios carentes de cultura cuyos instintos asesinos salen a reducir en una guerra con motivaciones rastreras como el pillaje, la trata de blancas y otras. El término 'Jihad', que originalmente significa 'hacer un esfuerzo por el camino de Dios', ha sido secuestrado por estos grupos y en cierta medida se ha implantado como una forma moderna de mercenarios. El régimen de Al-Assad ha liberado criminales en un marco de colaboración con 'Estado Islámico', y se han unido a este movimiento. Es un pacto entre criminales, especialmente sus jefes, que ven bien atraer a los jóvenes sin perspectivas mediante dinero u otras cosas. En última instancia, se trata de una organización mafiosa, en cuyo entorno se gana mucho dinero.

El 'Estado islámico' atrae a jóvenes de muchas partes del mundo, incluida Europa y, también, Alemania. ¿Qué impulsa a estos jóvenes a ponerse al lado de los terroristas?

La insatisfacción, la frustración, la discriminación. Estos jóvenes provienen en su mayoría de familias desestructuradas –y no de familias religiosas– y creen encontrar un sustituto en tal militancia. Hay una dialéctica de "ellos" y "nosotros", el bien y el mal. Esta es una muy simple visión del mundo. No es un fenómeno religioso o musulmán. Se dan y se han dado ocasiones similares en las que los jóvenes sienten que van a ser borrados de la sociedad a patadas. Actualmente estamos viendo también este tipo de gente. La constante referencia a la religión es el resultado del discurso de los medios de comunicación, que a veces se convierte en una profecía autocumplida. Estos fenómenos están todavía por describir desde el punto de vista socioeconómico y psicológico. Así tendríamos herramientas analíticas para luchar contra el fenómeno. En lugar de esto, constantemente se introduce la religión en la ecuación. Esto es un error, con el que se confunde a muchas personas de creencias musulmanas.

¿Qué se hace desde el Consejo Central de los Musulmanes respecto a este desarrollo?

Somos conscientes de nuestra responsabilidad. Han aumentado los ataques contra los musulmanes, incluso con artefactos incendiarios. Esto es preocupante. A la vez, es nuestra tarea dejar claro que para nosotros "Estado Islámico" no tiene nada que ver con la religión. No sólo en su deriva actual, sino desde su fundación. Tenemos, por ejemplo, publicada una aclaración sobre la exclusión de las minorías. No sólo explicamos que el Islam no la sustenta y que la condena en términos muy claros, sino que el Profeta se describió como intercesor contra los musulmanes que creían que podían oprimir a otras minorías.

En el Reino Unido, las autoridades musulmanas han emitido una fatua contra el 'Estado Islámico'. ¿Qué puede suponer esto? Los terroristas del EI, probablemente, no van a verse afectados.

En la práctica, esta fatwa no les va a afectar. Por cierto, no es la expresión de una opinión puntual, sino la de la inmensa mayoría de musulmanes, que desprecian y condenan al EI, distanciándose de sus postulados. Quizá con estos argumentos teológicos se le puedan aclarar las ideas a alguien que tuviera dudas o que, secretamente, apoyara al EI. Hay que dejar claro a estas personas que están en un camino completamente equivocado y horrible si creen que ese comportamiento puede tener una legitimación religiosa. En esa medida, esta fatwa puede tener un efecto poderoso. A sus verdaderos destinatarios, no les va a hacer mella.

Aiman ​​A. Mazyek es presidente del Consejo Central de los Musulmanes en Alemania.