Montenegro: "Small is beautiful"
23 de mayo de 2006El Financial Times, de Londres, apunta: "El resultado no es ninguna sorpresa. Para Montenegro, la alternativa no era una unión con Serbia capaz de funcionar, sino una unión inoperante. El primer paso para Montenegro debe ser ahora lograr un divorcio amistoso de Serbia, con separación de bienes. No hay motivo para que esa separación no se lleve a cabo sin problemas, tal como ocurrió con la República Checa y Eslovaquia, y ciertamente no como en el caso de la independencia de Bosnia, con sus catastróficas consecuencias."
Paradojas en la era de la globalización
Liberation, de París, comenta: "La cuestión se plantea ahora también dentro de la Unión Europea: el ejemplo de Montenegro fue estudiado ampliamente por los nacionalistas vascos y catalanes. Si Montenegro tiene la libertad de separarse, ¿por qué no también los vascos y catalanes, o los flamencos, los escoceses o también los corsos? ¿Se atomizará Europa en aras de la consigna 'small is beautifull' y de un deseo subestimado por salvar la propia identidad? Esta es una paradoja más en la hora de la globalización y las grandes unidades políticas y económicas."
Senderos que se bifurcan
La Repúbblica, de Roma, señala: "Para Serbia y Montenegro se bifurca ahora el largo y complejo camino de acercamiento a Europa y es probable que Podgorica avance más rápido por esa senda que Belgrado. La nueva realidad indica que un país tan pequeño como Montenegro, con apenas unos 650.000 habitantes, parece ser mucho más fácil de digerir. Serbia, por su parte, debe arreglar el asunto de la detención del general Ratko Mladic, buscado como criminal de guerra, que aún no se lleva a cabo; una cuestión que actualmente está frenando la incorporación de Serbia a la Unión Europea. En el caso de Montenegro, en cambio, el problema se refiere sobre todo a la economía."
A merced de Bruselas
El Tageszeitung, de Berlín, opina: "Ahora también la sociedad serbia tendrá que preguntarse hacia dónde quiere ir. El camino hacia Europa exige renovarse ideológica y económicamente. Eso no se llevará a cabo sin profundos conflictos políticos internos. La Unión Europea, en tanto, debe proclamar rápidamente el reconocimiento diplomático de Montenegro. Bruselas puede estar segura de que la 'coalición de los dispuestos' en Pordgorica tendrá que tragarse todos los sapos que la UE le sirva. Y está bien que así sea."