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Mucho más que tabaco

Emilia Rojas Sasse17 de mayo de 2005

En Alemania las autoridades publican por primera vez en internet la lista de todas las sustancias agregadas al tabaco de cigarros y cigarrillos, develando un riesgo potencial que aún deberá ser estudiado.

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No sólo el helado tiene azúcar...Imagen: AP

Desde hace largo tiempo circulan múltiples versiones sobre todo lo que inhalan los fumadores, además del humo del tabaco, por supuesto. Ahora los ciudadanos alemanes pueden averiguarlo con exactitud. Nada menos que 1174 páginas tiene la lista de aditivos que se encuentran en cigarros, cigarrillos y tabaco en general, presentada a la opinión pública por la ministra alemana de Agricultura y Protección al Consumidor, Renate Künast. Mentol, ron, regaliz, cacao y azúcar son algunas de las que suenan menos inquietantes, si bien uno se pregunta qué hacen dentro de los cigarrillos. Otras parecen aún más sospechosas: glicerina, amoniaco o fibras de celulosa, por ejemplo.

Riesgos desconocidos

La industria tabacalera recurre a ellas para mejorar el sabor de sus productos o paliar la irritación que produce el fumar, por ejemplo mediante el empleo del mentol. Se sospecha que otro de los propósitos es fomentar la creación de adicción. Básicamente se trata de sustancias permitidas en la elaboración de alimentos. Pero eso no debería bastar para tranquilizar al consumidor. Porque el problema de fondo radica en que nadie sabe qué efectos tienen realmente al quemarse en combinación con el tabaco.

"Esto excede el riesgo conocido que conlleva fumar", subrayó la ministra alemana, indicando que también habrá que examinar cuáles sustancias animan al mayor consumo. Averiguarlo tomará todavía bastante tiempo, considerando la enorme cantidad de sustancias que tendrán que ser analizadas para tal efecto. Sólo cuando se disponga de resultados podrán tomarse decisiones para prohibir determinados aditivos. Ante las dimensiones titánicas de la tarea, se apeló a un esfuerzo conjunto de los socios de la Unión Europea, cuya respuesta aún está por verse.

Transparencia ante todo

No obstante, por primera vez el consumidor cuenta con un catastro completo. Künast se mantiene así fiel a su principio de que cada quien tiene derecho a saber qué contiene lo que consume, máxima que también vale para los productos de tabaco. Algunos han criticado la publicación de la lista, por considerar que más bien confunde al consumidor. Otros, como los representantes de la Sociedad Alemana de Investigación de la Nicotina, han aplaudido la iniciativa, sin dejar de demandar -eso sí- una prohibición general de fumar en lugares públicos. "Cotidianamente mueren 383 personas en Alemania a causa del tabaco", subrayó el presidente de dicha agrupación, contrastando la cifra con la de muertes provocadas por accidentes de tránsito, que se eleva a 15 víctimas diarias.

La discusión ya es antigua y de seguro no terminará con al publicación de esta lista de sustancias. Además parece poco probable que los fumadores recurran a la página de internet del Ministerio para enterarse de todo lo que contienen en realidad los cigarrillos. Después de todo, un riesgo adicional difícilmente desanimará a los fumadores que ya conocen el peligro básico emanado de los componentes tradicionales del cigarrillo. Pero eso no desvirtúa las ventajas de la transparencia, en éste como en cualquier terreno.