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PolíticaÁfrica

Muere el expresidente argelino Abdelaziz Bouteflika

18 de septiembre de 2021

Conocido en su país como "Boutef", el exmandatario ayudó a llevar la paz a Argelia tras una década de guerra civil, aunque fue acusado de autoritarismo y represión.

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Algeria Germany
Imagen: Sidali Djarboub/AP/picture-alliance

El expresidente de Argelia Abdelaziz Bouteflika, depuesto en 2019 tras protestas masivas en su contra, murió el viernes (17.09.2021) a los 84 años de edad, anunció la televisión pública citando un comunicado de la presidencia.

El ex hombre fuerte dejó el poder en abril de 2019 bajo presión de los militares después de semanas de protestas contra sus planes de aspirar a un quinto período al frente del gobierno.

Desde su salida del poder después de 20 años, Bouteflika permaneció recluido bajo cuidados médicos en su residencia de Zeralda, al oeste de Argel.

Omnipresente en la vida política de Argelia durante décadas, el exgobernante se volvió casi invisible desde que sufrió un accidente vascular cerebral en 2013, tras lo cual pasó tres meses en recuperación.

Bouteflika no había dado señales de vida desde que el movimiento contestatario popular del "Hirak" y las fuerzas armadas lo forzaron a renunciar. Apareció por última vez en televisión anunciando su retiro.

Conocido en su país como "Boutef", el expresidente ayudó a llevar la paz a Argelia tras más de diez años de guerra civil en la década de 1990. Sin embargo, enfrentó críticas de grupos de derechos humanos y opositores que lo acusaron de autoritarismo y represión.

Bouteflika sobrevivió a la Primavera Árabe que depuso a otros gobiernos del norte de África entre 2010 y 2011, pero otro movimiento popular puso fin a su mando años más tarde.

Inteligente y taimado, era considerado un hombre con una habilidad innata para cabildear en los pasillos del poder, capaz de ser nombrado ministro a la edad de 25 años y negociar con terroristas en uno de los secuestros internacionales más impactantes de la historia.

También supo retirarse e intrigar en las sombras de la cruenta guerra civil argelina para emerger como el gran pacificador, salvador de una patria anegada en sangre.

Como ministro de Exteriores, estuvo presente en todas las crisis de la década de 1970, cuando Argelia fue miembro activo en el Movimiento de los Países Alineados, en el cual Bouteflika se convirtió en un férreo defensor de la causa palestina, acogiendo en su territorio a grupos calificados como terroristas.

gs (afp, efe, reuters)