No se confirma sospecha de brotes vegetales como causantes de la epidemia
6 de junio de 2011Este lunes (6.06.2011) se dio a conocer el resultado de los primeros análisis de muestras de brotes vegetales. Si bien mucho parecía indicar que los brotes podían representar el origen de la epidemia, las autoridades gubernamentales no quisieron darlo por sentado y prefirieron esperar el resultado de los análisis. Fueron analizadas unas 40 muestras de brotes, extraídas de una finca biológica, ubicada en Uelzen, en el norte de Alemania. En 23 de las 40 muestras estudiadas se obtuvo un resultado negativo. Sin embargo, el Ministerio de Protección al Consumidor de Baja Sajonia, recalcó que aún no se ha analizado la totalidad de las pruebas.
La planta biológica en cuestión había sido identificada por el Ministerio de Agricultura de Baja Sajonia como una “muy buena pista”. Esta planta comercializa 18 distintos tipos de mezclas de brotes, vendiéndolos a tiendas de productos dietéticos, así como minoristas y mayoristas, que proveen a los restaurantes de la región. Uno de sus clientes fue un restaurante de Lübeck, donde enfermaron 17 personas. Además también una trabajadora de la finca biológica mencionada contrajo la enfermedad. La epidemia provocada por la bacteria "E.coli" tiene preocupada a toda Alemania, donde ya se diagnosticó en más de 2.100 pacientes, de los cuales fallecieron 21.
De confirmarse que el origen de la enfermedad parte efectivamente de los brotes vegetales, tendríamos "buenas posibilidades de limitar rápidamente la epidemia”, había dicho el microbiólogo Alexander Kekulé, de la Universidad Halle-Wittenberg, entrevistado este lunes (6.06.2011) por el primer canal televisivo alemán, ARD. Pero el resultado negativo desecha las esperanzas de solucionar rápidamente la crisis y obliga a seguir buscando exhaustivamente al agente que desató la epidemia.
Lentitud y falta de eficacia
La epidemia también tiene repercusión a nivel político. Sobre todo el partido ecologista Los Verdes critica el manejo de la crisis por parte del Gobierno. “Me pregunto qué es lo que hacen realmente el Ministro de Salud y la Ministra de Protección al Consumidor”, dijo la jefa parlamentaria de Los Verdes, Renate Künast, al diario Berliner Zeitung. La política ecologista lamenta que la búsqueda del foco infeccioso no sea coordinada a nivel federal. Según Künast, hace falta un plan nacional de control, que incluya una lista de chequeo de las posibles vías de transmisión de un germen, desde el agricultor hasta el restaurante.
Su suplente, Bärbel Höhn, reprocha al Gobierno haber perdido tiempo valioso al inicio de la epidemia, hace tres semanas. “El Gobierno subestimó la crisis por completo y reaccionó recién al aumentar la presión pública. Si se hubiera actuado desde un principio, habría habido mucho mejores posibilidades de detectar el agente”, opinó Höhn en el matutino Passauer Neue Presse.
Se suman las voces críticas
Pero no sólo la oposición critica al Gobierno, también expertos reclaman la falta de eficacia y la demora al emprender la búsqueda del germen. “Cuando enfermaron las primeras personas, unos días después de consumir el producto contaminado, el lote afectado seguramente ya había sido vendido”, dijo Lothar Wieler, director del Instituto para Microbiología y Epizootia en la Universidad Libre de Berlín. Al no haber actuado inmediatamente se perdió tiempo muy valioso. Ahora se sabe que el primer paciente enfermó de diarrea el 1 de mayo. Sin embargo, el Instituto Robert Koch (RKI) fue informado recién 18 días más tarde.
Ulrich Frei, director médico del hospital berlinés Charité, también se muestra crítico frente al manejo de la crisis por parte del RKI. Al parecer, su hospital apenas recibió en la semana pasada los cuestionarios para pacientes EHEC. “Eso no alcanza. Se tendría que haber entrevistado a los pacientes”, opina Frei y añade que es necesaria una mejor política informativa.
Autora: Valeria Risi
Editor: Enrique López Magallón